El Señor de Guindos dijo, después de lo ocurrido en Chipre, que "los ahorros de los españoles son sagrados" y que nuestros pequeños ahorradores pueden estar tranquilos. No sé si el señor ministro se habrá olvidado de Bankia porque, a los de las preferentes, que en su gran mayoría son pequeños ahorradores, no les hicieron una quita del 7 o el 10%, sino que se lo quitaron todo. Tampoco sé que es lo que quiere decir con lo de "sagrado", porque, si pretenden devolver los depósitos por indulgencia plenaria, lo llevamos claro. Yo prefiero que sean más profanos y que me liquiden con dinero. El dinero, Señor de Guindos, no es sagrado, lo que sí es sagrado son los derechos de los ahorradores, que no merecen que se les quite el dinero profano al que tienen derecho, y que necesitan para su sagrado sustento. La Unión Europea ha perdido el norte, o más bien debería decir que, a los del sur, nos han hecho perder la orientación, la independencia económica y hasta la dignidad. Chipre, una pequeña comunidad con menos de la mitad de la población de Canarias, lo tiene claro y dice que no. Curioso que sea Alemania, por tercera vez, la que nos esté metiendo en este Eurocausto económico y social, tan cruento o más que los anteriores. Va a tener razón Milton Friedman, cuando decía que no seríamos capaces de construir la Unión Económica Europea que pretendemos, por no pensar que todavía "Los Chicago Boys" siguen intrigando para imponernos sus intereses, como diría Nicolás Maduro. Porque esto también es un veneno que nos está matando. Cuando Irán, Corea o China ya tienen armas nucleares, la fuerza de las armas es difícil de controlar. Ahora las guerras se ganan y se pierden desde los pináculos del poder económico. El dinero no se fabrica con uranio enriquecido, las bombas se construyen con papel moneda. Tengo un hijo de 26 años y otro de 21. Yo les pregunto qué carajo van a hacer, porque el señor Rajoy o la señora Merkel, gobiernan para ellos. Nosotros ya estamos viejitos y no duraremos para masticar ese turrón. Además, ya hicimos nuestro mayo del 68. ¡Ánimo, chiquillos! que ustedes están mejor preparados que ellos y que nosotros. Que el 15M dure todos los días y todos los meses del año, hasta que estos se enteren quién es y de quién es este puñetero mundo.