Sé que a partir de ahora mi amigo Silverio Matos disminuirá su nivel de estrés diario, su ritmo de trabajo, y dejará de sentir la presión de la agenda diaria. Eso le ayudará a estar más relajado y mejorará su estado de salud, que es en definitiva lo que todos y todas deseamos. Esta es la única forma que encuentro de poder seguir escribiendo sin que las lágrimas me impidan ver la pantalla.

Durante quince años he tenido el privilegio de trabajar a su lado, y los últimos seis como parte del equipo de gobierno municipal. Esto me ha hecho conocerle no solo como alcalde sino también como amigo.

Los rasgos que mejor lo definen, en mi opinión y en la de las personas que lo conocemos bien, son su honradez, su cercanía y su compromiso, con la ciudadanía y con el ser humano en general. En cuanto a valores humanos es un ejemplo para todos nosotros.

Silverio Matos imprimió una forma diferente de hacer política. Su actitud de escucha, apoyo, acompañamiento y crítica constructiva, ha hecho que la tarea haya sido siempre más fácil para todos y todas los que hemos trabajado a su lado.

Hemos podido impregnarnos un poco de esos valores que transmites cada día en tu trabajo político: la lealtad al proyecto, la honestidad, la responsabilidad del trabajo, la generosidad con los demás, la solidaridad, el sacrificio, el servicio a la ciudadanía, la sencillez, el respeto a los demás y sobre todo la humildad.

Estos principios han implantado un modelo político difícil de superar. Alcalde de altura, ha sabido estar muy por encima de todo aquello que no tenga que ver con la calidad humana, el respeto y el trabajo por los demás, dejando hoy una huella imborrable como ejemplo de humanidad, sencillez y honradez política.

La democracia nos abrió una puerta de entrada a la libertad y a los derechos fundamentales para la ciudadanía. La representación derivada de la decisión del pueblo a través de las urnas nos posibilita dirigir las instituciones desde y para la ciudadanía, desarrollando y defendiendo programas y derechos sociales. A través de Silverio Matos hemos aprendido y trabajado siempre bajo este paradigma que dignifica la política y la gestión local.

En palabras de Salvador Allende: "Nuestra fuerza radica en nuestros Principios", y nuestro principal compromiso es continuar defendiéndolos.

Maestro, gracias por habernos enseñado todo lo que sabemos.

Alcalde, has pasado a formar parte de la historia política, no solo de Santa Lucia sino también de toda Canarias.

Seguimos contando contigo.