Año nuevo, propósitos nuevos. El siempre activo Javier Sánchez-Simón, reconocido miembro del club Harley-Davidson, ha sorprendido a sus colega de la Agencia Tributaria con una bicicleta. Cada mañana llegaba en su motaza y con casco, como uno de los Ángeles del Infierno (sin faltar). Y ahora pasa dando pedales por el carril bici de la avenida Marítima en dirección a su oficina. Y sin casco. Todo un cambio. Aunque el pedaleiro sea eléctrico.