Varias misivas escritas por la fallecida princesa Diana a un antiguo mayordomo real sobre sus dos hijos, los príncipes Guillermo y Enrique, fueron subastadas ayer en Inglaterra en una puja de objetos relativos a la monarquía. Uno de los lotes de más éxito, que se adjudicó por 3.200 libras (3.700 euros), por encima del precio estimado, fue una carta en la que la princesa explica a Cyril Dickman, que estuvo empleado medio siglo en la Casa Real, que Guillermo es muy atento con su nuevo hermanito. Otros lotes, que se subastaron por cantidades similares, incluyen una carta del 17 de octubre de 1992, igualmente manuscrita, en la que Diana explica que, aunque sus dos hijos lo pasan bien en el internado, Enrique "se mete constantemente en problemas". Los objetos fueron subastados por los herederos de Dickman, que empezó a trabajar en el palacio de Buckingham, en Londres, durante la segunda Guerra Mundial y, según Cheffins, era uno de los empleados más apreciados por la familia real, e inspiró el personaje de Anthony Hopkins en la película Lo que queda del día.