En la política como en la vida no todo es línea recta. No todo son aplausos y honores del pueblo soberano. También hay momentos de baja. Este es el que atraviesa el alcalde de Teror, Gonzalo Rosario, que se encuentra hospitalizado en el Negrín por una afección pulmonar. Los médicos le han pedido reposo y le someten a un pormenorizado examen. "Estoy en el taller", decía con humor al móvil, ya que le recomiendan que evite las visitas.