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Uve O Equis

CC OO, quién te ha visto y quién te ve. CC OO, de censurado a censor. El sindicato represaliado que tanto tuvo que aguantar, que tanto luchó y lucha, al que tanto debemos todos los españoles, derrapa en las curvas. Está tan centrado en la meta que olvida lo sustancial: no llevarse a nadie por delante durante el recorrido.

Es duro, pero no es un error. Hablamos de Comisiones Obreras, cuya labor la TVE de Aznar intentó ocultar a los españoles de forma vergonzosa, quien presentó y ganó una demanda ante la Audiencia Nacional por "vulneración de los derechos fundamentales de huelga y libertad sindical" durante la huelga general del 20 de junio de 2002, el mismo que Alfredo Urdaci -director de informativos de TVE- trató de escamotear en los Telediarios cuando el peso de la ley le obligó a leer la resolución en todos los informativos del día y pasó a la historia por ocultarlo de forma torticera y cobarde tras el nombre de Cecé Oó.

Comisiones Obreras de RTVE defendió la censura previa contra Vox y pidió la anulación a la entrevista que, afortunadamente y tal y como se había anunciado, Carlos Franganillo realizó a Santiago Abascal anteayer en el Telediario. Quien enarbola el lema "RTVE es pública" (todos deberíamos hacerlo) no puede caer en el despropósito de llamar "a la reflexión a quienes defienden que Vox es un partido más del arco parlamentario" porque lo es guste o no guste. Ni debe afirmar que la entrevista a Abascal "no es una más de la serie iniciada con Pedro Sánchez y continuada con Pablo Casado", sino "un blanqueo democrático impropio de un medio público". No solo porque no es así, sino porque es justo al revés: el primer deber de una tele pública es servir a los ciudadanos que se expresan libre y democráticamente en las urnas.

La vergonzosa petición de CC OO solo sirvió para dar alas a la vergonzosa campaña de acoso y derribo que orquestó Vox contra la impecable labor de Franganillo, dentro de la vergonzosa y constante campaña más amplia de acoso y derribo contra la tele pública y el periodismo en general que realiza Vox -ese partido al que nunca llamaremos Uve O Equis-.

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