Aquí a la gente le gusta cantar, debe ser que cantar es una forma de alejar la magua, esa melancolía ancestral que se incrusta en el alma canaria, y la gente lo hace espontáneamente en las bodegas, en los cumpleaños, en celebraciones improvisadas. El insular ama la música, florecen las agrupaciones de todo tipo, incluidas las corales, y en particular las que cultivan la música tradicional de América. El dúo Sirope está formado por Alberto Rodríguez y Pedro Valcárcel, los dos son cuñados y palmeros. Alberto es voz, guitarra, bongó y percusión. Ha estado sobre los escenarios desde hace más de 30 años con orquestas, grupos de salsa y de música alternativa. Toca la bandurria, el laúd, el bajo y otros instrumentos. Hasta el inicio de esta aventura estaba dedicado a la guitarra clásica, con varias composiciones en su haber. Su hijo también tiene inclinación a la guitarra clásica. Pedro Valcárcel Carmona es docente, actualmente destinado en Jinámar, Gran Canaria. Su padre, Antonio, fue jefe de Telégrafos en Los Llanos de Aridane. Su abuela, María de las Casas, era una mujer ilustrada en épocas difíciles, también trabajó en Telégrafos y fue maestra en Granadilla de Abona, Tenerife. Pedro es hermano de Toño y Julio, también docentes, de Mercedes, psicóloga, de Nieves, asistente social, y de Anita. Pedro es voz y guitarra, un autodidacta que se ha ido animando poco a poco. Te sube la moral cuando canta a Joaquín Sabina y cuando trae sus versiones de boleros de siempre, de temas de los sesenta y los sesenta y sobre todo de la música cubana que tanto arraigo tiene en La Palma. Le gusta redescubrir los temas clásicos, sobre todo del acervo latinoamericano, a los que aporta sensibilidad y emoción. Está demostrado que la mezcla de las voces de Alberto y Pedro crea estilo en la forma de interpretar boleros, rancheras, pop, rock, clásica, incluso se atreven con algún tema en inglés e italiano. El dúo Sirope ha actuado en el casino de Telde, la sala Cuasquías de Las Palmas, el programa de Música en la calle del ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, La Escuela Encantada de El Paso, el bar El Populacho de Agüimes y en multitud de fiestas privadas. Larga vida al dúo Sirope, a Alberto y a Pedro, gente animada que vive la vida con música.