La sociedad está en constante evolución y, como consecuencia de ello, la transformación digital que se produce en el ámbito de la educación hace evidente la necesidad del uso de nuevas metodologías y herramientas en las aulas. Las posibilidades que ofrece el mundo digital a nivel educativo son infinitas.
Una herramienta muy útil a día de hoy en las aulas, es la aplicación llamada Class Dojo. Esta aplicación conecta al profesorado con el alumnado y sus familias. Cada alumno o alumna selecciona y edita a su gusto un avatar que será su propia representación virtual. Los docentes podrán crear una cultura positiva fomentando habilidades o valores, que serán recompensados virtualmente. Además, siempre que haya celebraciones o excursiones, los docentes podrán compartir con los familiares fotos o vídeos a través de la aplicación.
Hoy en día, existen una gran variedad de videojuegos para todas las edades y todos los gustos. Con ellos, se pueden trabajar varios contenidos educativos o reforzar las situaciones de aprendizaje. Hay juegos enfocados a la programación, como Bit by Bit, donde se puede trabajar la resolución de problemas y el pensamiento analítico y lógico. Otros juegos con un enfoque más artístico y creativo, como es el caso de Dreams, donde se puede modelar objetos y personajes, crear cortos de animación, videoclips o incluso crear videojuegos. También existen los juegos de baile, como el Just Dance, donde se puede reforzar los hábitos de trabajo individual y en equipo o trabajar el uso de los recursos expresivos del cuerpo y del movimiento.
Hace dos años, la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias propuso una liga de esports en 20 centros educativos del Archipiélago, aunque finalmente no pudo ser llevada a cabo. Sin embargo, la propuesta podría ser retomada en un futuro. La idea era que, durante 10 semanas, los equipos mixtos de cada centro combinarían los entrenamientos con talleres y actividades físicas. Los talleres formarían a los alumnos y alumnas sobre los hábitos saludables, la higiene postural, identidad y huella digital, creación de videojuegos y control de las emociones, entre otros.
Los videojuegos y los esports, al igual que los juegos o deportes tradicionales, tienen el poder de crear una comunidad inclusiva. Además, hay que resaltar el contenido integrador de los mismos, ya que cuando jugamos todos somos iguales.
Este mes de septiembre, se iniciará el proyecto de GR Madrid: la residencia de universitarios gamers. Se trata de un espacio de más de 3500 metros cuadrados, que ofrecerá a los estudiantes universitarios una experiencia en esports que se pueda compaginar con sus estudios. En ella, los estudiantes/jugadores podrán compartir, consumir y crear contenido relacionado con esports.
El encargado de liderar este proyecto será Emilio Hurtado Ruiz, abogado grancanario en el Departamento de Media & Technology y especializado en esports.
Uno de los motivos por los que se inició este proyecto, es para dar respuesta a las necesidades de los estudiantes actuales que demandan residencias equipadas con la última tecnología para poder estudiar, trabajar online o divertirse disfrutando de la mejor conexión y ordenadores preparados para soportar el software más exigente.
A modo de conclusión, se podría decir que el mundo digital y la educación pueden ir de la mano. Los videojuegos y los esports están creciendo en nuestra sociedad a un ritmo muy alto, por lo que es necesario adaptar esta realidad social al ámbito educativo.
De hecho, si nos adentramos un poco en el mundo de los esports, nos daremos cuenta rápidamente que los profesionales que trabajan en este sector son muy variados y de diferentes ámbitos. Desde el entrenador del club y los jugadores, hasta los psicólogos deportivos, los nutricionistas, los analistas o narradores de las partidas, los periodistas, los abogados, los fotógrafos, los community manager y un largo etcétera.
Por ello, algunos actos, como el de hace algunas semanas, donde el Consejo Superior de Deportes creaba una mesa de trabajo para conocer la realidad del sector de los esports, son muy importantes para que el proceso de transformación digital en la sociedad, y en este caso en el ámbito educativo, sea realizado con éxito.
