¿Ya se compró el casco? ¿Cómo va a ser eso? ¿Es que no sabe que hoy tiene prevista la NASA que un satélite del tamaño de una guagua impacte en la Tierra? Vale, ya sé que han dicho que el cacharro puede tirar más hacia Sudáfrica que a Valsequillo, pongamos por caso, pero los satélites, con eso de orbitar tantos años, no deben andar muy finos de puntería.

No sé si hacer como mi abuela Julia, que iba a casa de Tumbito, el de la tienda de aceite y vinagre, a hacer acopio de gofio cuando tenía el pálpito de una guerra o similar. No, no creo que haga falta, que ahora hay muchos adelantos y pueden mandar a un equipo de astronautas aguerridos a cargarse al pobre aparato, convertido en chatarra tras 20 años de dedicado servicio.

Él vendrá pensando, mientras el planeta se le hace cada vez más grande, que debería hacer un esfuerzo por caer en el centro de lo que todos llaman 'los mercados', esos entes todopoderosos que, por lo que parece, controlan el cotarro y tienen al personal asustadito perdido. Pero nada, por mucho que busca en el Google Earth, no hay manera, no aparecen los condenados. Perra vida la de los satélites guagüeros.