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Fernando Canellada

Azul atlántico

Fernando Canellada

46 coronas para José Sanchez

José Sánchez Rodríguez, el empresario de Arucas propietario de JSP, reunió ayer en sus oraciones a la familia y amigos en la parróquia del Corazón de María en un funeral concelebrado por once sacerdotes. Don José, como se le denominaba con respeto y admiración, falleció el pasado jueves a los 84 años, en la clínica San Roque, tras complicarse el párkinson que padecía pero que no le impidió dirigir el grupo empresarial hasta casi el final. Canarias entera le honró con 46 coronas de flores.

La última oportunidad de saludar a don José surgió a la puerta del periódico, cerca de su domicilio, cuando descansaba al sol, en su silla de ruedas. Pese a la guayabera de su vida, su cuerpo ya había dicho basta. Aquel industrial que dedicaba 12 horas a sus negosios, sin fiestas de guardar; que levantó una empresa modélica y pionera socialmente; que patrocinaba deporte y cultura; disfrutaba sus últimas horas al sol grancanario que le vio nacer.

Don José ya había entregado los «poderes» a su hermano sacerdote, en cuerpo y alma, poderes para esta y para la otra vida. Así Julio Sánchez recibió ayer incontables muestras de condolencia y pésame, junto a sus sobrinos, y agradeció al final de la ceremonia religiosa el acompañamiento y el cariño recibidos por la familia en la muerte de su hermano.

La larga vida empresarial del gran impulsor de JSP merece que, una vez pasada la implacable apisonadora del tiempo, su ejemplo y trayectoria permanezcan en el recuerdo.

Descanse en paz José Sánchez y en la gloria eterna, a la que llega «deshecho del duro bregar», como leyó su hermano en palabras de Unamuno,y a la que se encomendó en sus últimos momentos de lucidez. Cuando desde el presente se mira hacia atrás se entiende por qué el impulso de los grandes hombres nunca ha faltado en la historia de Gran Canaria. No hay futuro esplendoroso sin amor a la propia tierra. Don José lo demostró.

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