Reseteando

Vegueta: ambiciones y burradas

¿Cree que Vegueta y Triana sería declarado Patrimonio Mundial de la UNESCO?

¿Cree que Vegueta y Triana sería declarado Patrimonio Mundial de la UNESCO?

Javier Durán

Javier Durán

Genial y profiláctica la iniciativa para que Vegueta-Triana se convierta en Patrimonio Mundial de la Unesco. Primero, porque es un núcleo de personalidad distintiva dado sus rasgos de gestación y desarrollo; segundo, porque la alianza vecinal e institucional que lo promueve trata de protegerlo para que no sea dentro de poco a nada la ilustración de una simple postal. Pero lo más chirriante de todo es que Hidalgo y su secuaces vibren con esta primavera veguetiana y la lleven sin respiro al pleno para darle una efervescencia de sal de frutas. En erupción preelectoral rubrican hasta un túnel submarino para llegar a Santa Cruz. Pero el caso no es ir de postureo, sino hacer, y la verdad es que en Vegueta poco o nada se ha hecho a favor de su blindaje. Resulta un pedazo de burrada ver los coches por Doctor Chil, cuando apenas hay acera para entrar en un joya como la iglesia de San Francisco de Borja. O por Castillo, junto a la plaza del Espíritu Santo. O por el Guiniguada de la Dictadura. O el ala de la Catedral que nunca se terminó. O la plaza de Santa Ana como epicentro de celebraciones festivas que se meriendan poco a poco su cantería. O la ampliación del Museo Canario, que jamás se acabó. O los cables de todo tipo que embellecen las fachadas... O la atmósfera de una ciudad fantasma que depende del ciclo biológico de sus vecinos, que a su fin darán paso a hoteles y a algún nuevo rico que pondrá ventanas de aluminio... El virtuosismo preelectoral tiene una tragadera tan grande como la cámara de un horno crematorio: eche todo lo que quiera, y no haga preguntas. Pero hay que hacerlas. ¿Esta empatía municipal con la iniciativa para declarar Vegueta-Triana Patrimonio Mundial qué significa? ¿Un tapón de masilla para que no se vea el desafecto con el lugar por donde nació la ciudad? ¿Un anticipo de que en el programa electoral se va a incluir un párrafo (plagios no, por favor) dedicado al futuro del núcleo histórico? O bien: no sabemos qué hacer. A ver en qué acaba el propósito, ojalá consigan seriedad y rigor, y no cantamañanismo político.

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