"Creo que es lícito mentir por un objetivo tan grande como el amor"

El actor marbellí protagoniza el montaje 'La comedia de las mentiras', de Plauto, a las órdenes de Pep Antón Gómez, que ha colgado el cartel de 'entradas agotadas' este fin de semana en el Teatro Cuyás

33

El actor Pepón Nieto presenta la obra 'La ciudad de las mentiras' en el Cuyás

Pepón Nieto (Marbella, 1967) aterrizó ayer en Las Palmas de Gran Canaria con el director y dramaturgo catalán Pep Antón Gómez para colgar el cartel de 'entradas agotadas' en el Teatro Cuyás, donde exhiben hoy y mañana el montaje La comedia de las mentiras, de Plauto. El actor protagoniza esta aventura clásica de enredos y mentiras en un elenco coral que completan María Barranco, José Troncoso, Paco Tous, Raúl Jimenez , Angy Fernández y Marta Guerras.

Entre líos, engaños e intrigas, ¿qué buscan en realidad los personajes de La comedia de las mentiras?

Estos personajes buscan, como todos, el amor. Los hermanos, Leónidas e Hipólita, a quienes interpretan Raúl Jiménez y Angy Fernández, están enamorados de personas que no les convienen o que su padre no quiere para ellos. En realidad, son dos perlas de hijos que, además, buscan el amor equivocado, pero, claro, están enamorados y, para conseguirlo, entran en la trama los engaños, las mentiras, los piratas, los secuestros y los rescates. Y en este embrollo, que se va convirtiendo en un nudo cada vez más gordo, les ayuda Calidoro, al que interpreto yo, que es un esclavo que les ha cuidado toda la vida y que les ayudará mintiendo. Pero ya sabemos todos que las mentiras tienen las patitas muy cortas y que hay que tener mucha memoria para mentir. Y Calidoro miente con muy poca vergüenza y muy poca memoria, pero los personajes se irán dando cuenta de que esas mentiras les interesan porque, en el fondo, todos mienten para conseguir el amor y para ser felices. Y yo creo que es totalmente lícito mentir por un objetivo tan grande como el amor.

¿Por qué los esquemas de la comedia clásica mantienen su frescura tantos siglos después?

El teatro clásico es universal y o hay nada más clásico que el teatro grecolatino, que es el caso de La comedia de las mentiras, del que beben corrientes posteriores que también son teatro clásico, como el teatro del Siglo de Oro, el teatro isabelino o el shakesperiano, que beben de este tipo de comedias de enredos donde los personajes son muy arquetípicos, muy reconocibles e, incluso, muy payasos. Creo que podríamos haber montado el espectáculo con clowns y también hubiera funcionado.

Pep Antón y usted abanderan una manera de entender el humor muy matemática y precisa. ¿A qué se refiere?

Es que la comedia es muy matemática y funciona como una tabla de gimnasia sueca, midiendo mucho los tiempos y siendo muy preciso en el ritmo porque, si no llegas a ese ritmo, la comedia se puede caer en un segundo. En ese sentido, la comedia es muy matemática, no es sólo lo que sientes como personaje o cuando cuentas la historia, sino que hay una técnica muy clara que hay que dominar.

En este sentido, ¿la comedia es su hábitat natural?

Yo llevo mucho tiempo haciendo comedia y me manejo bien en ella porque me gusta mucho la respuesta inmediata del público. El feedback y el trasvase de energía que posibilita una comedia teatral es muy rápida, porque funciona en el momento. En cambio, la respuesta en el drama es el silencio, porque es otro tipo de escucha, mientras que en la comedia el orgasmo es inmediato y estupendo, aunque también admite gatillazos (risas). Pero para mí es muy gratificante hacer comedia porque me gusta mucho que el público se lo pase bien. Que la gente pague una entrada, vaya al teatro y dedique su tiempo a prestarte atención, y lo pase bien, y tú vayas intuyendo por dónde llevarles, es algo que me fascina.

¿Cree que la comedia en España cumple a nivel de calidad?

En este país hay mucha gente que hace muy bien la comedia.

¿Quiénes son sus referentes?

Pues Saza [José Sazatornil] o José Luis López Vázquez. En general, la generación anterior a la mía, que muchos compañeros desconocen por edad y que a mí me parecen fascinantes. A mí me emociona ver a Luis Escobar, a José Bódalo, a María Luisa Ponte y a todos estos intérpretes a quienes les tocó vivir un cine y un teatro muy duro, porque las giras eran muy largas y se hacían un montón de funciones, pero que eran maravillosos y servían a la comedia como nadie. En España tenemos la suerte de contar con muchos referentes en un montón de películas y en obras de teatro que podemos ver todavía.

Su filmografía aloja varios títulos de Álex de la Iglesia y de Félix Sabroso, ¿le gusta repetir experiencia con los cineastas?

Con Álex de la Iglesia he hecho cuatro películas y con Félix Sabroso y Dunia Ayaso, de quienes me acuerdo en Las Palmas, hice otras cuatro películas, pero también he trabajado con otros directores.

¿Podría decantarse por el teatro, el cine o la televisión?

Personalmente, me quedo con el teatro porque es donde me siento más libre y menos supeditado al montaje o a lo que los demás decidan sobre tu trabajo. En el teatro estás solo cuando sales al escenario, no hay director, no se repite, no puedes decir "uy, perdón, me he equivocado", sino que tiras pa' lante, porque eres tú y eres libre, para bien o para mal, y eres responsable de lo que te esté pasando. A mí lo que más me llena y me satisface es el teatro, pero entiendo que componer un personaje o contar una historia, hacerlo creíble, hacerlo cercano, y que eso prenda algo en la gente para que vaya detrás comprende el mismo proceso en el cine, en el teatro y en la televisión.

¿Cómo vivió su paso por el programa Masterchef?

Pues fue una experiencia que estuvo bien, aunque muy dura, pero disfruté mucho. Me echaron muy pronto porque estaba precisamente ensayando para La comedia de las mentiras por las tardes, que es cuando daban clases, con lo cual no me podía quedar y los subestimé. No pensaba que fuera a ser tan complicado, pero lo pasé bien e hicimos un grupo muy bueno.

¿Con qué otros proyectos compaginará la gira de La comedia de las mentiras?

Estas semanas, en paralelo, estoy rodando la serie italiana Lontano da te [Lejos de ti], una coproducción con España que se está filmando en Sevilla, a donde volveré el lunes. Y en cine, haré la próxima película de Marina Seresesky.

Compartir el artículo

stats