Canciones como La flaca, El lado oscuro, Depende, Bonito o Humo sonarán con aroma de aniversario en Arucas mañana sábado en la segunda jornada de Fiestoron. La banda Jarabe de Palo es uno de los triunfos del cartel. El líder y cantante Pau Donés (Montanuy, Huesca, 1966) avanza cómo será este concierto y de la recta final de un año que supone, de momento, el punto y final a su carrera musical, toda vez que consuma su retirada a comienzos de 2019.
¿ Cómo se encuentra Pau Donés y que tal están funcionando los conciertos de la gira que trae a Jarabe de Palo este sábado al Fiestoron, en Arucas?
Muy bien, ayer [por el miércoles] tocamos en la Manga del Mar Menor y vamos camino de Torrelavega, donde tocamos el viernes. Y el sábado, para el Fiestoron.
Una gira de aniversario por las dos décadas de vida de Jarabe de Palo, y quizás la última, teniendo en cuenta que ha anunciado que el próximo año se retira de los escenarios y de la vida musical.¿Qué se va a encontrar el público del Fiestoron?
Este año celebramos nuestros 20 años y estamos con la idea de parar el año que viene, y se junta una cosa con la otra. Estamos haciendo un espectáculo de canciones conocidas, de grandes éxitos, con toda la banda y a todo trapo. Somos seis músicos, un repertorio donde hay creo 13 canciones que en algún momento han estado en el top 5 de la radio española en los últimos 20 años, y sobre todo, venimos con ganas de liarla.
Por razones de salud, la secuencia artística de Pau Donés y Jarabe de Palo alteró su hoja de ruta en los últimos años. Y ahora, tras concluir esta gira, y antes de la despedida, emprende otra por teatros y auditorios.
Para este otoño tenemos tres proyectos en la mano: un libro, que se llama 100 letras, que son 96 canciones que hemos grabado en disco y otras cuatro que hemos grabado pero que no están editadas. Las hicimos en un momento de nuestra vida y quedaron ahí fuera de los discos. Y con este libro quería dar a letras el protagonismo que merecen. Hay muchas canciones que recordamos por su música, pero muy pocas que por sus letras, y la mayoría de las letras de Jarabe, que al igual que ocurre con muchos compositores, hay letras que despuntan y otras caen en el olvido.
Son 20 años del grupo. La efemeride se presta a reflexionar sobre el camino andado desde el lanzamiento de La Flaca (1996) y cuál va a ser el futuro de Jarabe de Palo, si no está escrito.
Basicamente es mostrar el trabajo de estos 20 años, sobre todo en lo literario.Y luego tenemos un disco, Jarabe Filarmónico, que grabamos con la Orquesta Filarmónica de Costa Rica. Fuimos a Costa Rica a tocar, en un intento con la Filarmónica a ver qué pasa, hicimos tres conciertos en el Teatro de San José con el maestro Araya, el director de la Orquesta, y decidimos compartir esos conciertos con el mundo y quedamos en grabar, y a finales de septiembre u octubre lo lanzamos.
Se cierra el círculo. Lo digo porque con estos arreglos sinfónicos, el repertorio de Jarabe de Palo se ha trabajado desde todos los formatos posibles.
Bueno, hemos versionado nuestras canciones de varias maneras. Y digo de varias maneras porque en cada gira volvemos a versionar, pero el formato clásico es muy potente porque tu voz se pone a la altura de 60 instrumentos acústicos, entre chelos, violines, contrabajos, tubas,...
¿Fue complicado diseñar los arreglos para cambiar el color de las canciones?
Fíjate que estás jugando con gente de primera división, que sabe de armonía, que ha vivido de sus instrumentos desde hace muchos años. Yo no se leer música. Este disco es el segundo proyecto del que hablaba, y el tercero es la gira para octubre y noviembre. Será otro repertorio, menos conocido por el público quizás, pero nopor ello menos alegre y divertido, y con la intención de decir adiós, hasta la vista.
¿La despedida es un hasta luego, o un hasta pronto?
Va a ser un hasta luego, seguro.
¿Es la salud la que condiciona este tipo de decisiones?
No, por supuesto que no. Yo de salud estoy bien, sigo con mi quimio y sin tumores, estoy estupendo. Por mi continuaría..., lo que pasa es que llevo 20 años en esto y me gustaría hacer otras cosas.
¿La enfermedad le ha cambiado la escala de valores de la vida?
Para nada. Este era un plan que llevaba en la cabeza hace tiempo, pero con un poco de desviación. Mi idea era el año pasado celebrar los 50 Palos e irme, pero no se pudo. Tengo ganas de otras cosas, la música es muy adictiva y no hay manera de salirse.
Jarabe de Palo ha tenido una generosa cuota de popularidad. Los tiempos ahora son otros. ¿Echa en falta el oficio del fabricante de canciones en esta época de postureo mediático?
Ahí has dado en el clavo. Lo que interesa ahora en el mundo de la música es el postureo. Ayer hablábamos de Operación Triunfo y alguien decía que la música estaba ahí, pero que lo importante era ver como ellos y ellas se sentían, cómo vivían. En la música ahora, es lo que hay. El Maluma ese, y el reggaeton que hace él y otros no interesa a nadie. Lo que si parece que importa es si tiene novia, si le pone los cuernos, como viste, los tatuajes que lleva. El músico pasa a primer plano, y la música queda atrás. La industria lo que quiere es vender discos, y la manera se la suda. Escucha las radios, todas ponen lo mismo, y todo suena igual: ahora toca reggaeton, ahora pop romántico, ahora música disco mediocre, pues venga. También es verdad es que ahora las discográficas son las que buscan los grupos en internet, que esto me parece alucinante. ¿Y por qué? Porque en internet como compositor puedes colgar tus canaciones y a ver qué pasa. Un caso clarísimo: te puedes llamar Pablo Alborán, colgar tus canciones en internet, que te podrá gustar más o menos pero es un compositor que hace canción romántica con criterio, y despuntas sin tener que negociar con discográfica.
El mundo al revés.
El negocio de la música está estancado en esta ponzoña de la música comercial.
Sus recientes declaraciones sobre que le parecía una vergüenza que en España hubiera políticos presos en el siglo XXI por el proceso independendista han tenido impacto en las redes sociales.
Es que lo han conseguido. A mí me la trae al pairo todo esto, y lo he visto en las redes. Al final, lo que ocurre, el trasfondo de todo esto es que los polítcos nos han dividido a todos, que nos peleemos por gilipolleces. Lo que me preocupa es que lo van a hacer Rato o Bárcenas con el dinero que se han llevado. Yo tengo amigos en Madrid, Cantabria, en Galicia, amigos que se sienten españoles, amigos que se sienten independentistas, cada uno como quiere pensar, y eso es bueno. En la práctica, terminamos cabreados unos con los otros, y no con ellos, que es como debería de ser.
