Se acabó lo que se daba. La sala La Choza, en el CC Cita, en Playa del Inglés, llega al fin de ciclo y se despide de la clientela, músicos y amigos este fin de semana. "La Choza llega a su fin y nos despediremos rodeados de amigos, música en directo y fiestita de la buena con mucho amor". Este escueto post en los perfiles en redes sociales daba cuenta esta semana que no hay vuelta atrás, y que la Isla pierde una sala de referencia para el directo. Como bien lamentaba Roberto Pérez, responsable del local, "a la gente le cuesta un mundo moverse media hora en coche hasta el sur". Y lo que no se sostiene, termina por caer.

Larga se prevé la noche de este sábado 25 de agosto en La Choza. En el escenario, a las 23.00 h, Otus y Malamutte. Otus es el proyecto de Juan Dominguez,y su último trabajo se titula Death Throes; canciones que se escoran a Neil Young, Nick Cave, Steve Von Till y Scott Kelly. Es Otus "el hombre de la eterna sonrisa", tal como lo presenta La Choza, que abre una noche agridulce y seguramente amarga, que se completa con el directo de Malamutte. Hardcore y punk a velocidad demoníaca, aunque desde La Choza se les presenta, con su habitual ironía, como "los niños bonitos del mainstream canario".

Bromas aparte, La Choza se despide. Y lo hace con honores si se gira la cabeza atrás y se hace repaso a los artistas que han tenido acomodo en el local del CC Cita. Como ejemplo, las visitas de Jello Biafra, Brujería, Mono, Adrift, El Páramo, Cuzo, Lendakaris Muertos, Hars Toke, Okkultokrati o Sonnöv, por citar los más notables, además de prestarse como espacio para las bandas locales que con buen criterio siguen apostando por repertorio propio. Se fue Mojo Cub y ahora La Choza. Lo que ocurra a partir de ahora es problema del público.