Levan Akin narra la relación homosexual entre dos bailarines en uno de los países más homófobos de Europa en esta película que debutó en la pasada Seminci, donde su protagonista obtuvo el premio al mejor actor. La danza folclórica es en Georgia un baluarte de la tradición y de la masculinidad, motivo por el cual Akin eligió ese tema como contexto de su película, cuyo estreno en ese país fue boicoteado desde sectores conservadores radicales. El filme cuenta la historia de Merab, un bailarín que ve su mundo fuertemente sacudido con la llegada de Irakli, que paradójicamente pronto se convierte en su mayor rival, y también en su mayor deseo. En este entorno conservador, Merab se verá obligado a liberarse y arriesgarlo todo.