El 20 por ciento de las mujeres embarazadas sufre alteraciones respiratorias durante el sueño que pueden producir efectos adversos en el feto, ha señalado hoy la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ).

De hecho, la prevalencia del síndrome de apnea del sueño en mujeres embarazadas es del 8,4 % en el primer trimestre y del 19,7 % en el tercero.

Los expertos advierten de que un mayor índice de masa corporal y la mayor edad de la madre aumentan el riesgo de sufrir apnea del sueño en el tercer trimestre.

Además, recuerdan que los trastornos respiratorios del sueño se asocian con resultados cardiovasculares adversos en las mujeres.

Según la doctora María José Masdeu, neumóloga y miembro de la Separ, "las limitaciones de flujo de aire durante el sueño son un posible mecanismo de desarrollo de trastornos de hipertensión gestacional".

La Separ recuerda que los trastornos del sueño se presentan en el 75 % de las mujeres embarazadas. El embarazo en sí mismo es un factor de riesgo para desarrollar una apnea del sueño ocasional o empeorar la que ya está diagnosticada.

Según los expertos, las alteraciones hormonales y metabólicas observadas en los trastornos respiratorios del sueño afectan negativamente en el ambiente uterino.

"El ronquido habitual y la apnea del sueño son factores de riesgo del desarrollo de diabetes tipo 2, intolerancia a la glucosa y resistencia a la insulina", señala la doctora Masdeu.

También pueden afectar al feto y al nivel neonatal. De hecho, investigaciones realizadas recientemente los asocian con cesáreas no planificadas previamente.