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Esto es lo que puedes picotear en un día y perder peso

El picoteo es un placer al que resulta difícil renunciar y al que puedes sucumbir siempre que elijas opciones saciantes e hipocalóricas

Hambre o ansiedad son las dos principales razones que te hacen sucumbir al placer de picotear entre horas, un placer que puede resultar peligroso para tu salud al añadirte kilos de más indeseados. Pero bien puedes dejarte llevar y picotear siempre que elijas bien, es decir, siempre que tomes tentempiés ligeros y equilibrados que te sacien sin perjudicar tu línea. Así que ya puedes irte despidiendo de los chips, galletas, chocolatinas, barritas energéticas y bollería industrial.

Los mejores tentempiés para no ganar peso e incluso perderlo son las proteínas y los alimentos cargados de fibra. El efecto saciante de ambos tipos de alimentos evitará que te atiborres. Los dos grupos de comestibles que contienen tanto proteína como fibra son los frutos secos y las legumbres.

Los frutos secos pasan por ser el mejor ansiolítico natural, pero siempre que no te pases. Los mejores son los naturales y sin sal. Aunque tal vez tu paladar los prefiera tostados, has de saber que en su versión menos procesada encontrarás todas sus propiedades intactas y serán más beneficiosos y digeribles para tu organismo.

Las legumbres tienen un efecto similar al de los frutos secos, pero tampoco conviene pasarse. La moderación en todo lo que comes y bebes debe ser tu máxima si lo que te propones es perder peso.

Por supuesto, una pieza de fruta natural en tus picoteos de media mañana y en la merienda siempre es una buena opción cargada de fibra y vitaminas. Manzanas, peras, fresas, plátanos o cualquiera de la familia de los cítricos son sobre todo fáciles de transportar y cómodas de comer sin manchar demasiado a tu alrededor cuando estás fuera de casa.

También puedes recurrir a la proteína animal. El salmón ahumado y el huevo son opciones excelentes de proteína animal. Ambos resultan ligeros y saciantes. Si los combinas, tienes doble ración de proteína saciante, que puedes comer sobre una tostada o envueltos en una hoja de lechuga o col, al estilo coreano. Tanto el salmón como el huevo te aportarán además vitamina D, controladora natural de la hormona del apetito.

Lo que puedes beber y lo que no

Para beber entre horas, si no quieres engordar, pasa de los aperitivos alcohólicos y de los refrescos, aunque sean ligths. Tampoco son buena opción los zumos de frutas. Todas estas bebidas están cargadas de azúcar. Por eso, la mejor opción siempre es el agua, ya sea sin o con gas. También son buenas alternativas las infusiones de sabor suave que no necesitan endulzar y los licuados de hortalizas. Una solución interesante es el zumo de tomate. Si le añades un toque de pimienta, potenciarás el gasto energético en su digestión.