Las banderas de 25 países recorrieron ayer el CEIP Alcaravaneras. Los alumnos extranjeros de este centro público portaban sus banderas como muestra de la multiculturalidad de la capital grancanaria. Una de las bazas esgrimidas en la lucha de Las Palmas de Gran Canaria para ser reconocida como Capital Europea de la Cultura 2016.

El CEIP Alcaravaneras, uno de los centros públicos que más estudiantes extranjeros acoge en sus aulas, celebraba ayer el Día de la Paz, pero también quiso apoyar el sueño de poner al municipio en el centro de Europa. Y es que durante la mañana de ayer quedó claro que Las Palmas de Gran Canaria es una ciudad cosmopolita en la que conviven en paz personas de todo el mundo.

"Nosotros queremos inculcar y defender los valores de tolerancia en el colegio, en la casa y en la ciudad", dijo el director del centro, Gregorio Guerra, durante su intervención en el acto que fue traducida al inglés y al polaco debido a la presencia y posterior actuación del Coro de los Chicos y Hombres Pueris Cantores Olivenses de Gdansk (Polonia).

Esta ciudad polaca también se presenta como Capital Europea de la Cultura 2016, ya que, según el calendario de la Unión Europea, dicho reconocimiento se compartirá ese año entre España y Polonia. Ambas ciudades han realizado diferentes encuentros y actuaciones desde hace varios meses como apoyo mutuo a sus aspiraciones.

"La música es un elemento de unión y paz. Esta es una ciudad abierta al resto del mundo con cada vez más actos culturales. Es una ciudad tolerante, por eso podemos conseguir ser Capital Europea de la Cultura 2016", añadió el director.

Por su parte, el director de la Oficina de la Candidatura, Jorge Betancor, alabó la unión entre Las Palmas de Gran Canaria y Gdansk, que comparten algunas características, ya que ambas son "ciudades marítimas".

Los niños salieron en fila al patio del colegio para sentarse en una de las gradas bajo un cartel que rezaba: "En el cole convivimos todos en paz". Como ejemplo, en esta cola alumnos de todos los países compartían confidencias. "Somos amigos y no me importa de donde sea", comentaba Fernando Pico, de ocho años y de Ecuador, junto a Cristian Jiménez, de 10 años y de Cuba. También estaban representados países como Portugal, Argelia, Camerún, Rusia, Filipinas, Mauritania, Argentina, Reino Unido, Italia o Canadá.