Si alguna vez lo latino ocupó un lugar en la primera división del poder internacional apenas tiene hoy en día consecuencias. Fue en el siglo XVII. Sin embargo, el entonces imperio español de ultramar, Latinoamérica, dos siglos después de la emancipación colonial, aparece en la actualidad a cuenta de la pujanza de algunos países, como Brasil y México, así como de otros -Argentina, Chile- con papeles aún en ciernes, como una potencia emergente, la única latina, en el nuevo orden internacional del siglo XXI. Esto significa que lo español (y lo portugués) globalizado desde los años ochenta del pasado siglo, comienzan a tomar posiciones, con un peso específico en lo alto de la escala mundial, por vez primera en el periodo contemporáneo.

Analizar esta nueva Latinoamérica, con todas sus novedades, contradicciones, potencialidades, disparidades y lastres, a través de la versión de personalidades latinoamericanas de proyección internacional en todos los campos -la política, la cultura, la sociología, la geografía urbana, la salud, el psicoanálisis- es el objeto de la IV edición del Seminario Atlántico de Pensamiento (ver programa en www.seminarioatlantico.es), que tendrá lugar del miércoles 16 al viernes 18 en el Cicca. Bajo el título Latinoamérica, laboratorio mundial, se darán cita en la capital desde el secretario general Iberoamericano, Enrique V. Iglesias, hasta el ministro argentino de Cultura, Jorge E. Coscia, pasando por el número dos de la OMS, el brasileño Paulo M. Buss, o el escritor mexicano Jorge Volpi, entre otras figuras. El seminario, organizado por el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, es un evento de calado en el programa de la candidatura a capital cultural europea 2016. La pura atlanticidad isleña, puesta en acto con claves de futuro.