La historia de María Belón Bordes, la mujer que logró sobrevivir junto a su familia al gigantesco tsunami que los arrolló en un hotel de Tailandia en 2004, ha servido de argumento para el exitoso filme Lo imposible, de J. A. Bayona y protagonizado por Naomi Watts, que encarna a su personaje. Belón tiene que ver no poco con Gran Canaria, de donde son sus padres y tres de sus cinco hermanos. Sólo los compromisos profesionales de su padre, un ingeniero industrial que en razón de su trabajo se establecía durante largas etapas en diferentes lugares de la Península, impidieron que María naciera en el Archipiélago. Así, vio la luz en 1966 en Madrid. De hecho, tiene familia, muchos primos, en Canarias, pero ya no acostumbra a visitar el Archipiélago como hacía antes.

La tremenda peripecia de la familia Álvarez-Belón aquel 26 de diciembre de 2004 tiene, ciertamente, los ingredientes con los que se hace una buena película, pero es ante todo una historia de supervivencia ante un ataque de la naturaleza descontrolada. María, su esposo Quique y sus hijos Lucas, Tomás y Simón residían en aquel entonces en Japón, pero pasaba unos días de vacaciones en Tailandia. Marido e hijos estaban en la piscina del hotel, mientras ella se duchaba a pocos metros. Un seísmo con epicentro en la costa oeste de Sumatra se tradujo en una espeluznante ola de más de ocho metros de altura, a la que no le costó demasiado trabajo superar las paredes del complejo hotelero en el que descansaba la familia.

La ola gigantesca primero arrasó con el marido e hijos y luego se llevó por delante a María, que vio a uno de los niños arrastrados por la descontrolada masa de agua. De alguna forma, la familia sobrevivió al embate de un muro de agua implacable. La madre pensó que perdería a sus seres queridos en aquella circunstancia, pero no fue así. De hecho, ella sacó, malherida, a uno de sus hijos del agua. Tras la supervivencia llegaron las convalecencias, la física y la psicológica, porque la vida sigue y hay que aprender a seguir adelante.

Esa historia ha servido de base a un filme que ya arrasa en las salas cinematográficas españolas. Adobado con los aditamentos de una gran producción pero basado en una historia real como la vida misma, aunque pueda parecer increíble.

Belón colaboró luego en la película. Ayudó a Naomi Watts a construir el personaje y viajó a Tailandia para el rodaje, enfrentándose a las difíciles sensaciones que la aguardaban en el lugar de la tragedia. Se enfrentó con el mismo coraje que le permitió salir adelante en unas circunstancias más que adversas. En distintas ocasiones ha preferido adjudicar a la mera suerte el que ella y su familia sobrevivieran al tsunami. Sea como fuere, su historia está ahora, revestida de los ropajes de la ficción, en las pantallas de las salas de cine.