"Su legado nos hará crecer". En un intento de sobreponerse a la "enorme tristeza" por el fallecimiento de José Alonso, sacerdote y catedrático de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), el rector José Regidor destacaba ayer la huella de su "amigo desde hace 40 años" como un "patrimonio de valor incalculable" para la institución. Regidor destacó el carácter aglutinador y conciliador del "entrañable" filósofo y teólogo, creador del Aula Manuel Alemán.

La muerte de José Alonso deja un profundo pesar en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, no sólo por la pérdida de "un profesor incansable" en las áreas de Filosofía y Teología, sino también "porque una persona que transmitía fe, cariño y bonhomía por donde transitaba. Era difícil no sentirse arrastrado por el afecto que siempre regalaba a su paso José Alonso, que, con una sonrisa permanente en su rostro, creaba un ámbito de entendimiento en el que buscar encuentros", recoge la nota de pesar publicada por la institución universitaria.

Francisco Rubio Royo, el primer rector de la ULPGC y gran amigo personal de José Alonso, lo definió como "una persona buena, pero en el sentido conciliador, abierto en sus ideas, integrador, una persona positiva ante la vida, que intentaba entender a las personas. Como él hay muy pocos en la vida y eso es lo que hace grande a una persona".

La muerte de José Alonso también ha supuesto una triste sorpresa para Manuel Lobo, segundo rector que ha tenido la Universidad grancanaria. "El trato con Pepe, tanto en el Consejo Social como en el Aula Manuel Alemán, siempre fue exquisito. Era una persona muy colaboradora, siempre dispuesta a echar una mano. Como rector me facilitó mucho las relaciones con el Instituto Teológico con el que la Universidad mantiene un convenio de colaboración. Era una gran persona y su muerte me deja muy apesadumbrado", apuntó Lobo.

En el Instituto Superior de Teología de las Islas Canarias la pérdida de esta "extraordinaria" persona deja una sensación de orfandad, dado que dentro del Istic, antiguo Centro Teológico, José Alonso fue uno de los fundadores y primeros profesores de Filosofía, según destacó el secretario de estudio Carlos Marrero. "Era un hombre disponible, entusiasta y entusiasmador para todo tipo de proyectos. Facilitó enormemente las relaciones entre el Instituto de Teología y la Universidad de Las Palmas. Para nosotros es uno de nuestros padres en el Instituto".

Daniel Barreto, subdirector del Instituto Teológico, compartió con Alonso el trabajo en el Aula Manuel Alemán desde el 2005. "La labor que ha hecho es de una dinamización cultural extraordinaria que ha tenido una influencia enorme en los últimos diez o quince años en la ciudad de Las Palmas y ha sido modélico en lo que respecta al diálogo entre la fe y la cultura. Pepe es un ejemplo de escucha, diálogo entre el mundo de la fe y la pluralidad cultural más amplia", subrayó.

Entre los asistentes al velatorio se encontraba ayer José Miguel Pérez, muy afectado, ya que guardaba una estrecha relación con Alonso.