Fueron apenas dos minutos de espectacular ocultación solar solo visible en Australia, pero ayer el eclipse se pudo disfrutar en cualquier parte del globo, transmitido en riguroso directo a través de internet a partir de las 20.30 (hora canaria). Un equipo de seis personas trasladado a ese país, pertenecientes al proyecto europeo Gloria, captó las imágenes y las volcó a la red. Al frente del operativo se encontraba Miquel Serra-Ricart, investigador barcelonés que lleva 23 años trabajando en el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC).

Serra-Ricart no las tenía todas consigo horas antes del eclipse total de sol y alertaba de las especiales dificultades que ofrecía para poder filmarlo y transmitirlo en óptimas condiciones. "Va a ser un eclipse complicado", decía, "porque se va a producir justo con la salida del sol, así que éste estará muy bajo sobre el horizonte, con una probabilidad alta de que haya nubes. El fenómeno dura muy poquito, pero si todo va bien, será espectacular".

Para minimizar estos riesgos, los científicos se distribuyeron en tres puntos de observación. Serra-Ricart coordinaba desde una población llamada Mareeba, mientras que otro grupo se encontraba en la costa, cerca de Cairns, y un tercero en el desierto australiano. "Hemos optado por tres puntos de transmisiones diferentes para intentar el máximo de posibilidades", explicaba.

El fenómeno tenía que ser captado en Australia, por donde pasaba la banda de totalidad antes de meterse en el Pacífico. Esta banda de totalidad es la parte central del eclipse, y desde los lugares que caen en ella se ve un eclipse total de sol precedido y seguido de fases de ocultación parcial. Así, los científicos que siguen estos fenómenos se van desplazando a distintas partes del mundo. "El último eclipse fue en julio de 2010, fuimos a verlo a la Isla de Pascua", recordó el barcelonés.

Gloria es un proyecto educativo europeo que retransmite por internet fenómenos astronómicos. En agosto hicieron lo propio con una aurora y un tránsito de Venus. Serra-Ricart no es el único representante del IAC en el proyecto: también está Miguel Ángel Pío.

El principal objetivo de la misión encabezada por el científico barcelonés era la retransmisión por internet, pero el equipo también tomó "un montón de imágenes, que nos permitirán estudiar especialmente la corona solar, que es el equivalente a la atmósfera en el sol y que normalmente no se puede ver porque la propia luz la tapa, pero en un eclipse total de sol, esta corona luce brillante. Esto quizá sea lo más espectacular", dijo Serra-Ricart. Finalmente, se refirió, entre bromas, a la mala fama que tienen los eclipses de sol para culturas más primitivas. "Normalmente está asociado a los malos augurios", dijo.

El fenómeno despertó gran expectación en el noroeste de Australia. Así, más de 50.000 personas esperaban desde horas antes en el extremo noreste del país que el cielo estuviera despejado para poder presenciar el eclipse, según informó Efe.

El recorrido de este eclipse total de Sol comenzó en Australia al amanecer del miércoles en la zona aborigen de Arnhem Land, después sigiuió por el Cabo York, antes de seguir por el Pacífico, aunque el mejor lugar, si el clima lo permite, es la ciudad de Cairns, en el estado de Queensland, según Astronomía Australia. Allí se pudo ver en su plenitud el eclipse total de Sol, por dos minutos y cincos segundos alrededor de las 6.38 hora local (19.38 GMT) a unos 13,5 grados sobre el horizonte. La Oficina de Meteorología había pronosticado lluvias aisladas y la presencia de nubes en el cielo.

"En el culmen del eclipse y en plena mañana, la luz se debilitará a niveles de un crepúsculo. Muchos animales se sentirán confundidos y se comportarán como si fuera un atardecer y se verá el brillo de las estrellas y los planetas", explicaba Signe Riemer-Sørensen, físico-matemática de la Universidad de Queensland.

La científica enfatizó que se podrá apreciar en este eclipse la corona o zona superior de la atmósfera del Sol, así como el efecto llamado "anillo de diamante" o el área brillante que aparece al "borde" de la Luna. Este espectáculo se podrá ver sólo parcialmente en el resto de la costa oriental de Australia, Papúa Nueva Guinea, Nueva Zelanda, el este de Indonesia, así como en el sur de Argentina y Chile.