La detección de carne de caballo en diferentes alimentos (hamburguesas, pastas), ha creado malestar entre los consumidores que se sienten engañados. Las autoridades sanitarias defienden que este cárnico no causa un perjuicio para la salud, sino que se trata de una situación de fraude, al no estar bien reflejado la composición del producto en el etiquetado. Los especialistas valoran su calidad, que entre otras cuestiones se caracteriza por su alto valor nutricional. "La carne de caballo es mucho más saludable, tiene más calidad y menos grasa que la de vaca", explica Francisco Doreste, veterinario experto en equinos. En su opìnión, "el problema es si el caballo está medicado o si la carne está en malas condiciones, en cuyo caso da igual que sea de caballo, de vaca o de cualquier otro animal", soistiene el experto.