Los responsables del Instituto de Medicina Legal en la provincia de Las Palmas (IML) mostraron ayer su preocupación ante el aumento de suicidios en Gran Canaria durante el año pasado. Sólo en esta isla se quitaran la vida de manera voluntaria 137 personas, más de la mitad de las muertes violentas registradas en todo 2012, que se situaron en 238.

"Hemos encargado un estudio comparativo desde 2007 porque aparentemente hay un incremento de casos", explicó la subdirectora del IML, Eva Bajo, que presentó en rueda de prensa la memoria de actuaciones del año pasado, un acto en el que también participaron la directora del Instituto, María José Meilán, y el director general de Relaciones con la Administración de Justicia del Gobierno de Canarias, Alejandro Parres García.

Se trata de la primera memoria que se presenta en los seis años de andadura del IML, gracias, en este caso, al "esfuerzo extra" de todos los forenses, según destacó Meilán, que accedió al cargo hace apenas nueve meses. De ahí que la doctora Bajo no pueda concretar el incremento de suicidios hasta que esté concluido el estudio, cuya finalidad es "alertar a la sociedad de sus causas porque es un problema sanitario", añadió la subdirectora. El resto de fallecimientos violentos ocurridos en Gran Canaria se corresponden con 93 accidentes y ocho homicidios.

En ese sentido, en contra de lo que se especulaba en el mundillo judicial, Meilán explicó que la crisis no ha desencadenado un estallido de comportamientos violentos, aunque sí se aprecia un repunte en los últimos meses, según los datos que manejan los forenses a través de la policía y los juzgados de guardia. Bajo agregó que la media de homicidios se ha mantenido estable, entre cinco y seis durante los últimos años.

El director de Relaciones con la Administración de Justicia, Alejandro Parres, también se mostró satisfecho con el trabajo hecho por los forenses en la provincia de Las Palmas, pues los expertos en medicina legal emitieron 22.813 informes, de los que 15.846 se circunscriben al servicio clínico, 15.515 son dictámenes médicos y 331 psicológicos; mientras que el laboratorio ejecutó 6.102 analíticas, de las cuales 6.010 fueron de toxicología y 92 de genética.

Además, el departamento de patología practicó un total de 865 autopsias. De ellas, 651 se realizaron en Gran Canaria, la mayoría de ellas, 391, por causas naturales. El 78 % de esos fallecimientos se produjo por motivos cardiacos, mientras que el resto de muertes están relacionadas con problemas digestivos, respiratorios y neurológicos. A esas cifras hay que sumar las 238 muertes violentas detectadas y otras 22 que están pendientes de informe, según los datos de la memoria 2012.

En Lanzarote se hicieron 105 autopsias: 26 por muertes violentas y el resto por razones naturales, mientras que en Fuerteventura se llevaron a cabo 109 exámenes cadavéricos: 42 se corresponden con muertes violentas y 67 son fallecimientos naturales.

Sin embargo, el mayor porcentaje de expedientes abiertos está relacionado con accidentes de tráfico. Sólo en Gran Canaria se emitieron 6.359 informes, una cifra que también se ha incrementado respecto a otros años, en parte por la picaresca para cobrar la indemnización de la compañía aseguradora. De hecho, los peritos de estas empresas han empezado a combatir estas prácticas fraudulentas con pruebas biomecánicas, un recurso que antes llegaba al forense en contadas ocasiones. En la misma isla se realizaron 3.867 dictámenes por agresiones físicas.