La socióloga holandesa Saskia Sassen, Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales 2013, ha afirmado hoy que es un "gran honor" ser distinguida con un galardón de "tanto prestigio" internacional.

En conversación telefónica con Efe desde Londres, Sassen (La Haya, 1949), quien pasó parte de su infancia en Buenos Aires, ha considerado que "en el espacio de la lengua española no hay un premio como el Príncipe de Asturias", un "gran prestigio" que se extiende también al resto del mundo, ha valorado.

Sassen ha añadido que se sintió "muy honrada" cuando hace un mes conoció que estaba entre los candidatos junto con "personas extraordinarias", como el economista norteamericano Paul Romer, quien ha quedado finalista, o el sociólogo argentino Bernardo Kliksberg.

Por ello, a la pregunta de si asistirá en octubre a la ceremonia de entrega de los Premios ha respondido tajante con un: "absolutamente, estaré".

El jurado del Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales ha valorado en su acta la contribución de Sassen "a la sociología urbana y al análisis de las dimensiones social, económica y política de la globalización", y ha destacado como una de sus mayores aportaciones el concepto de "ciudad global", actualmente aceptado y empleado en todas las ciencias sociales.

"Yo diría que el concepto es más famosa que yo; si hubiera hecho un copyright o tuviera derechos de propiedad intelectual como las farmacéuticas hubiera ganado mucho dinero", ha bromeado Sassen, quien ha insistido en que es un "gran honor" que el jurado haya valorado de este modo su trabajo.

Saskia Sassen es una de las sociólogas de mayor prestigio internacional en el campo de la globalización y las estrategias urbanas.

El acta del jurado destaca la dimensión internacional de sus ideas, sus estudios sobre las migraciones y el papel de las grandes ciudades en la dirección de la economía internacional y el concepto ciudad global.

"Para Sassen, las ciudades globales forman redes que concentran el poder de decisión y nuevas relaciones entre territorio, autoridad y derechos, diluyendo así el papel de las fronteras", refleja el acta del jurado, que incide en que también son "generadoras de grandes desigualdades y segregación social debido, entre otras causas, a las diferencias en el acceso a las tecnologías de la información".