¿Con qué objetivo se fundó la Escuela MBA en Canarias?

MBA se fundó en 1985 para ayudar a directores de empresas para mejorar sus negocios, y se tomó como modelo las escuelas de MBA de estudios empresariales que habían en Madrid y Barcelona. Como las islas están muy lejos de la Península, y las comunicaciones no eran tan eficientes como lo son hoy, fue necesario que en Canarias hubiera una escuela propia que pudiera formar a la gente según las necesidades específicas de las Islas, con un enfoque en el turismo y en las industrias que aquí había.

¿Qué objetivos persigue actualmente en el Archipiélago?

Nos gustaría que ocupara el primer puesto entre las escuelas a la que se dirigiera cualquier empresa, pública o privada, para formar a sus dirigentes. También que fuera el organismo al que se dirigieran los padres para buscar ayuda y planes de estudios eficaces, y para que cuando sus hijos terminaran sus estudios de educación secundaria pudieran formarse para luego trabajar en el mundo empresarial. Aparte del programa de la MBA, se ha introducido una licenciatura para un perfil universitario entre 18 y 21 años que se interesaría por una formación académica en un programa de cuatro años cuyo objetivo es formar a los futuros dirigentes en un marco de economía global. Luego se intentaría introducirlos en el mercado británico para que vieran como funciona otro sistema y perfeccionar su inglés para trabajar en cualquier empresa a nivel mundial.

¿Son complementarios con los estudios hechos en las Islas?

Sí, porque el programa fue diseñado para que el alumno permaneciera tres años en Canarias y uno más en del Reino Unido. El estudiante tiene así cuatro universidades entre las que eligirían una para su último año de estudio. Incluso si al terminar sus estudios, estos alumnos no fueran a trabajar en una empresa internacional de otro país, al forma Canarias parte de la economía mundial, necesitarían esos fundamentos para poder llevar a cabo su trabajo de una manera eficaz.

¿Se han licenciado muchos alumnos en este programa?

Como el programa empezó en el año 95 lleva cuatro años funcionando. No todos los alumnos se han ido a cursar el último año en el Reino Unido. Digamos que de los mil licenciados, la mitad está en Inglaterra y la otra mitad aquí.

¿Qué ventajas ofrece este sistema comparado con el de la formación que se da en España?

Nos gusta pensar que lo que nos hace distinto es que si la Universidad pone énfasis en la formación académica en la teoría, en la MBA hay un enfoque más bien práctico. Entendemos la importancia que tiene la teoría, pero procuramos centrarnos en la práctica en la mayor manera posible.

¿Cree que el sistema español de estudios está anticuado?

Es distinto. Como en todos lo países católicos en los que hay la autoridad del Papa, hay un sistema más autoritario. La diferencia entre el sistema español y otros europeos en que aquí está la figura del profesor o dirigente que le dice a la gente lo que tiene que hacer. En los países escandinavos o el Reino Unido, el sistema fomenta la participación de todos los integrantes. Igual el sistema español es menos eficaz en el sentido de que han conservado la figura de autoridad en las empresas y la educación, mientras que cuando todos participan por igual pueden surgir las mejores ideas, no de quien lo pretende saber todo. Hay que tener en cuenta que las ideas pueden venir de todos lados y no de las autoridades, tener la mente abierta para aprovecharlas al máxima.

Y se le une el lastre un país que tuvo 40 años de dictadura.

Sí, al igual que en Europa del Este, que al principio todo era un caos tras el comunismo y luego empezó a resurgir como aquí. Pero allí también hubo un retraso importante y unos valores que se quedaron del sistema anterior.

¿Cómo sobrevive MBA en medio de la crisis en España?

Como a todas las escuelas de Europa, a MBA nos cuesta sobrevivir en la situación actual, y la forma en la que lo intentamos es, principalmente, explorando en las necesidades de los negocios de la gente joven. No empezamos a ofrecer programas, sino que hay una investigación previa en cuanto a las necesidades del mercado y de la gente. A principios del año que viene se va a lanzar un máster para ingenieros o gente graduada y licenciada donde vamos a hacer una introducción en el mundo empresarial, por lo que habrá una parte de teoría con las ideas básicas de cómo llevar una empresa, que se va a combinar con tres meses de práctica en una empresa donde pueden aprender cómo funciona. En Canarias uno de los problemas más graves es que hay gente con muy buenas ideas, pero que no tienen los fondos necesarios para desarrollarlas. Se va a lanzar un nuevo programa que se va a llamar Business angels, que será un intento de poner en contacto a la gente que tiene esas buenas ideas, pero no tiene el dinero para apoyarlas. Y por otro, a gente que tiene dinero para invertir en esas ideas. Se va a crear un ambiente en que ambos podrán colaborar para crear sus negocios.

¿Qué la ha parecido el crecimiento que ha experimentado Canarias en los últimos 30 años?

Vine por primera vez en 1991, después de una recesión muy importante en Europa. Antes de esa recesión España había crecido mucho y muy rápido gracias a la Unión Europea y los Fondos Europeos. Vi cómo se desarrollaron todas las infraestructuras de la ciudad y de la isla, con carreteras, ópera, y todo tipo de mejoras turísticas. Creció mucho la industria turística porque el este de Europa estaba creciendo también a pasos muy rápidos y muchos turistas de Inglaterra, Alemania, Escandinavia, elegían Canarias como destino y por eso el turismo creció muy rápido también. El puerto también prosperó entonces. Recuerdo ver muchos barcos de Corea llegar a traer mercancías y contribuyó a la riqueza general. Y el Régimen Especial ayudó mucho porque los turistas venían para comprar objetos de lujo más baratos. Había mucha energía, un espíritu emprendedor y optimismo de cara al futuro.