Las víctimas del "caso Kárate" expresaron este lunes su satisfacción por la sentencia del Tribunal Supremo que confirma, casi en su integridad, las condenas impuestas a los tres principales procesados y han considerado que, para ellas, llegó el momento de "pasar página y cerrar heridas".
"La sentencia, a nuestro juicio, permite cerrar la herida social que se abrió en su momento y pasar página a las víctimas y a sus padres y madres de manera ya definitiva, para que puedan recuperar el sosiego necesario. La sentencia es desde esa perspectiva un paso muy positivo", ha señalado el letrado José María Palomino.
Este abogado de Gran Canaria representó ante la Audiencia de Las Palmas a una treintena de víctimas de los abusos que se perpetraron durante años en la academia de Fernando Torres Baena, de las 42 cuyos casos todavía no habían prescrito cuando la denuncia de una escolar destapó la existencia del mayor caso de pederastia (por número de víctimas y duración) juzgado hasta ahora en España.
La sentencia confirma los 302 años de cárcel impuestos por la Audiencia a Torres Baena, un excampeón de kárate que aprovechó su ascendencia sobre sus alumnos para montar toda una pirámide de abusos sexuales, que funcionaba casi como una secta, según consideró probado la Audiencia Provincial y ahora corrobora el Supremo.
También ratifica los 126 años de cárcel que recayeron sobre una de sus colaboradoras, Ivonne González Herrera, aunque reduce ligeramente, de 148 a 140 años de prisión, el castigo para otra de las monitoras de su academia, su esposa María José González Peña.
El letrado de las víctimas ha explicado, tras una primera lectura de la sentencia, que sus clientes están satisfechos de que el Supremo haya acogido "en lo sustancial" sus pretensiones respecto a los procesados en esta causa por abusos y corrupción de menores.
Palomino ha restado importancia a la rebaja de la condena de González Peña, porque "carece de efectos prácticos" (su pena queda en 140 años, pero aún así sigue estando por encima del periodo máximo de estancia en prisión previsto por las leyes españolas).
Respecto a la absolución del cuarto acusado, Juan Luis Benítez Peña, que el Supremo confirma, este letrado no cree que las víctimas vayan a seguir impugnándola ante el Tribunal Constitucional, porque él considera que ha llegado el momento de que cierren sus heridas.
"La sentencia dice que sucedieron hechos y que los testimonios que se han realizado sobre este punto no son inciertos, pero que existen dudas razonables en dos de los tres magistrados que juzgaron el caso. Esas dudas razonables son las que llevan a la absolución", ha apuntado el letrado de la Asociación de Víctimas del Caso Kárate.
