La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmó ayer que las dos vacunas contra el ébola que se prueban en distintos países son seguras para quienes las reciben y que los planes avanzan para administrarlas en los tres países de África occidental afectados por la epidemia. "Sabemos que las dos vacunas que están en la fase uno de ensayos clínicos parecen seguras y muestran una buena inmunogenicidad", dijo la directora general adjunta de la OMS, Marie-Paule Kieny.

La OMS convocó el jueves a una reunión, por teleconferencia, de expertos en vacunas de todo el mundo, quienes evaluaron los resultados preliminares de los ensayos clínicos en marcha y, más concretamente, cuestiones relacionadas con la seguridad y financiación de estos productos. Las vacunas VSV-ZEBOV, desarrollada en Canadá y cuyos derechos de patente han sido adquiridos recientemente por la farmacéutica Merck; y la ChAd-EBO, de la británica GSK, están siendo probadas en voluntarios en Estados Unidos y en varios países de Europa y África.

Kieny señaló también que una vacunación masiva contra el ébola, como parte de la última fase de ensayos clínicos podría empezar a finales de este mes en Liberia, con las dos vacunas que se experimentan. En Sierra Leona y Guinea, los otros dos países donde el virus del ébola sigue circulando, se planea empezar la vacunación en febrero, dijo ayer la responsable de la OMS. Las referidas vacunas se administrarán a varias miles de personas sanas en los tres países. Se prevé que participen unas 37.000 personas.

"La tercera fase de los ensayos significará administrar la vacuna a voluntarios sanos en el área donde el virus se está transmitiendo y esto es lo que realmente probará que funcionan", dijo la responsable de la OMS. En el proceso acelerado que se decidió lanzar para desarrollar una vacuna contra el ébola, ante la gravedad de la epidemia que afecta al oeste de África, la fase 2 de los ensayos clínicos se efectuará de manera paralela a la tercera, confirmó la experta.

La segunda fase se realizará con un número mayor al de personas que están participando en la primera -en Estados Unidos, Alemania, el Reino Unido, Suiza y países africanos- y que suman algunos centenares, e incorporará a grupos específicos, como niños, que no están expuestos al virus.

Tras haberse determinado de manera suficiente que ambas vacunas son seguras para los receptores, los ensayos que se realizan con ellas están evaluando ahora su nivel de inmunogenicidad, es decir la respuesta inmunitaria que provocan en el organismo. Esto permitirá dilucidar si una de las vacunas es, en ese sentido, más eficaz que la otra, así como fijar la dosis necesaria para estimular los anticuerpos.

Kieny confió que las respuestas a esas preguntas se tendrán de aquí a dos o cuatro semanas. La eficiencia, propiamente dicha, de las vacunas será determinada en las campañas de vacunación en África, que adoptarán una forma distinta en cada uno de los tres países involucrados. Una vez que los fabricantes hayan decidido la dosis adecuada, la vacunación empezará en Liberia, con tres grupos diferentes de 9.000 personas cada uno, detalló Kieny.

El primero recibirá la vacuna VSV-ZEBOV, el segundo la ChAd-EBO y la tercera un placebo. En Sierra Leona sólo se probará una de las dos vacunas, pero todavía no se ha decido cuál, con 6.000 voluntarios. Un diseño completamente distinto se adoptará en Guinea, donde se vacunará a los trabajadores sanitarios que trabajan en el área donde se desarrollará la fase tres del ensayo clínico. En este país se aplicará una estrategia por "círculos".