La consejera de Sanidad, Brígida Mendoza, garantizó ayer que en Canarias predominará el criterio médico en la prescripción de los nuevos tratamientos contra la hepatitis C. En una reunión mantenida ayer con los representantes de la Asociación de Enfermos y Trasplantados Hepáticos de Canarias (Aetheca), Mendoza se comprometió a suministrar los fármacos siguiendo exclusivamente las indicaciones de los especialistas.

De esta forma, la consejera de Sanidad descartó que en el acceso a los nuevos fármacos, que son altamente eficaces contra el virus, vayan a influir criterios economicistas, como temen los afectados. No en vano, el Sovaldi, uno de los fármacos de nueva generación recientemente aprobado, cuesta unos 25.000 euros que, al combinarlo con otras medicinas, el tratamiento ascendería a unos 40.000 euros.

"Confiamos en la palabra de la consejera. Esperamos que sean los médicos quienes decidan quién accede a los nuevos medicamentos", comentó Benigno Martínez, presidente de Aetheca, después de la reunión celebrada ayer en la que además participaron tres jefes de servicio del Hospital Doctor Negrín, el Hospital Insular y el Hospital de La Candelaria.

España aprobó recientemente los nuevos fármacos contra el virus de la hepatitis C que tienen unas tasas de curación de más del 90 por ciento. A ellos accederán los pacientes que se encuentren en las fases más avanzada de la enfermedad que puede causar cirrosis, cáncer de hígado y finalmente la muerte.

Una priorización a la que se oponen los afectados por el virus que han protagonizado diversas movilizaciones en el territorio nacional exigiendo un acceso universal a los tratamientos de elevado coste. Sobre todo después de que el Ministerio de Sanidad reconociera que sólo accederán a ellos en todo el país entre 5.000 y 6.000 enfermos.

"Lo que pedimos es que se trate a todos los que lo necesitan, no que se diga desde un primer momento a cuántos se podrá tratar teniendo en cuenta lo que cuesta", añadió Martínez que explicó que es la Consejería de Sanidad la que tendrá que hacer frente al gasto de estos tratamientos en las Islas.

Sólo en Canarias la asociación Aetheca calcula que hay unos 40.000 afectados por la hepatitis C, de los cuales el 30 por ciento sabe que padece esta enfermedad. Esto se debe a que es una patología que tarda muchos años en presentar los primeros síntomas.

"Entendemos que no se pueden dar los tratamientos a todos los afectados a la vez porque exige un seguimiento y la realización de numerosas pruebas simultáneas, pero pedimos que finalmente todos vayan accediendo a ellos", defendió el presidente de Aetheca que salió "contento" de la reunión mantenida con la consejera de Sanidad.

Asimismo, Mendoza les comunicó que ya han puesto algunos tratamientos en los principales hospitales públicos canarios y que en unas semanas se procederá a iniciarlos con nuevos pacientes. Los tratamientos de nueva generación son más cortos (12 semanas de duración), menos tóxicos, más eficaz y conllevan menos efectos secundarios para el paciente.

Según las líneas establecidas por el Ministerio de Sanidad, los primeros pacientes que se beneficiarán de los nuevos fármacos son los trasplantados o en lista de espera, los que padezcan cirrosis avanzada, los que sufran una evolución rápida de la enfermedad o en los que el uso de otros fármacos haya fracasado.