Ofrecer un espacio de apoyo y alivio a la experiencia de sufrimiento del paciente, abrir y mantener canales de comunicación con sus seres queridos, expresar los miedos y explorar la capacidad de expresión emocional, facilitar procesos de reflexión y recuerdos y favorecer espacios creativos que faciliten el afrontamiento de la despedida. Estos son los objetivos del programa de musicoterapia hospitalaria puesto en marcha en febrero de este año en la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, gracias a un convenio suscrito entre la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias y la Fundación Mapfre Guanarteme, impulsora del proyecto.

El programa se lleva a cabo en coordinación con el equipo interdisciplinar que conforma la Unidad de Cuidados Paliativos. Para su desarrollo, una musicoterapeuta acude dos días a la semana a la unidad de hospitalización de Paliativos, y dedica otro día a la visita de pacientes en su domicilio. Estos son seleccionados previamente por los profesionales sanitarios, quienes establecen además el objetivo terapéutico de la intervención, que puede ser el acompañamiento terapéutico, favorecer el descanso o mejorar el confort, entre otros.

Desde la puesta en marcha del programa se han realizado 154 sesiones, con un total de 71 pacientes atendidos.