Nunca llueve a gusto de todos. La donación de 22 equipos oncológicos valorados en 17 millones de euros por parte de la Fundación Amancio Ortega, propietario del grupo textil Inditex (Zara, Bershka o Massimo Dutti) al Gobierno autonómico provocó el mayoritario agradecimiento de la sociedad isleña, sobre todo entre colectivos de médicos y pacientes, pero también algunas críticas, limitadas a la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública en Canarias (Adspc) y Podemos.
Desde el anuncio del obsequio de 320 millones para la lucha contra el cáncer en toda España, a finales de marzo, la decisión del empresario gallego generó debate, pero la polémica aumentó durante las últimas semanas a causa de la firma de los convenios entre la fundación benefactora y las instituciones públicas favorecidas. A final de mayo, el presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo, consideró el gesto del propietario de Zara un motivo de "optimismo e ilusión" tras rubricar el acuerdo con el vicepresidente de la Fundación Amancio Ortega, José Arnau, junto al consejero autonómico de Sanidad, José Manuel Baltar.
Desde las filas del Partido Socialista cuestionaron entonces el reparto del material a través de su portavoz parlamentario, Iñaki Lavandera, al no destinar equipos de radioterapia a Fuerteventura y Lanzarote, aunque agradecieron la "generosidad" de Amancio Ortega. Al día siguiente, el grupo parlamentario de Podemos sí arremetió contra la propia donación del dueño de Pull&Bear, es decir, el fondo y no la forma.
"Es lamentable que nos alegremos porque este señor regale a nuestro servicio público los equipos oncológicos que deberíamos poder adquirir con medios propios", deploró el diputado morado Juan Márquez antes de argumentar que un sistema público "no es sostenible con la calderilla de los multimillonarios". A su juicio, "no podemos situarnos en el marco que quiere el neoliberalismo, donde una población desesperada por la degradación de los derechos y su bienestar, se arrodilla para agradecer al rico por sus donaciones".
Beneficio privado
En opinión de Márquez, "se debería cambiar el modelo de gestión sanitaria que Coalición Canaria ha implantado en las Islas, pero también los que más tienen deberían pagar los mismo porcentajes de impuestos que las clases medias". Es más, si dejaran de especular con la sanidad pública para beneficiar a unas cuantas empresas privadas seguramente no tendríamos que recurrir a ningún rico con sentimiento de culpa", sentenció el parlamentario autonómico de Podemos.
En similares términos se pronunciaron desde Defensa de la Sanidad Pública, también a principios de junio, en sintonía con el rechazo a la donación del fundador de Inditex expresado por asociaciones homónimas en Aragón, Galicia o País Vasco. "Ante el entusiasmo que derrochan por este motivo tanto el presidente Clavijo como el consejero Baltar no podemos sino sonrojarnos de vergüenza ajena y puntualizar que (...) nuestra comunidad no tiene que recurrir, aceptar, ni agradecer la generosidad, altruismo o caridad de ninguna persona o entidad. Menos aún de quien siendo el mayor accionista de una de las mayores empresas y fortunas personales del Estado tendría que demostrar no su filantropía, sino su obligación de contribuir al erario público de forma proporcional a sus beneficios y en la misma proporción que el resto de los contribuyentes", subrayaron desde Adspc antes de apostar por una fiscalidad progresiva para una redistribución de recursos que priorice al sistema sanitario, incluso a través de "una fórmula legal de evasión de impuestos" como la Reserva de Inversiones de Canarias.
Después de reclamar la mejora de las condiciones laborales en la fabricación de la ropa de Inditex en países como Marruecos o Bangladesh, el colectivo de profesionales y usuarios argumentó que no se necesita más tecnología en la sanidad pública, "sino mejor utilización y sobre todo, insistir en otras políticas de carácter social de las que depende en gran medida la salud, especialmente como consecuencia de la crisis económica, las políticas neoliberales y los factores demográficos". Por ello, desde Adspc exigieron la recuperación del derecho universal a la salud perdido con la reforma y recortes sanitarios
Además, "hay que combatir la falacia de la insostenibilidad del sistema público de salud, un pretexto para privatizar la sanidad y hacerse con la gran bolsa de recursos a costa de mas desigualdades", advirtieron desde el colectivo. Según la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública en Canarias, desde 2011 se ha incrementado hasta un 18% el porcentaje de población con un seguro privado y "Baltar pertenece a ese mundo, nada más y nada menos que como vicepresidente estatal de la patronal de la sanidad privada".
Ante las críticas, el consejero de Sanidad aprovechó la pasada semana una visita a La Gomera para reiterar el agradecimiento a Amancio Ortega. En su opinión, "la solidaridad bien entendida empieza por uno mismo y antes de que los fondos de una fundación se vayan para otro entorno, mejor que lo hagan a una necesidad primaria como es la sanidad en el estado del bienestar".
También el presidente del Colegio de Médicos de Las Palmas, Pedro Cabrera, apostó por el "pragmatismo" como ideología al considerar "bienvenidas" las donaciones, aunque solicitó una reforma de la Ley de Mecenazgo para facilitar el procedimiento. A su juicio, "es un crítica maximalista y excesiva, queda hasta progre, pero no ven el sufrimiento de muchas personas y familias, ojalá saliera todo de nuestros impuestos y no tuviéramos que depender de donaciones o, como dicen sus enemigos, la caridad de unas empresas que quieren ahorrarse impuestos".
Precisamente, la presidenta de la Asociación Canaria de Cáncer de Mama y Ginecológico, Marisa Herrera, calificó de "muy politizadas" las críticas vertidas desde Adspc. En su opinión, "son una imprudencia y una salida de tono para estar en el candelero, porque todos los pacientes están encantados, hay que aceptar cualquier donación con los brazos abiertos".
También el presidente de la Asociación Española Contra el Cáncer en Las Palmas, Fernando Fraile, agradeció el obsequio de Amancio Ortega, porque "ahorra dinero a todos los españoles, aunque el sistema sanitario público tiene que garantizar su propia sostenibilidad. No entiendo las críticas, la colaboración público-privada es absolutamente necesaria", subrayó el presidente de Aecc en Las Palmas antes de sentenciar que "toda la sociedad debe involucrarse en la lucha contra el cáncer".
