La Asociación Pequeño Valiente presentó en el Hotel Santa Catalina los nuevos proyectos de la fundación y habló de los logros y ayudas que ofrece a los niños enfermos y a sus familiares.José Jerez, presidente de la asociación, mencionó durante su intervención que 250 familias se benefician en Canarias de las oportunidades y facilidades que les aporta Pequeño Valiente. "Estamos inmersos en un proyecto que tiene como objetivo dar todos los elementos necesarios, en cualquier ámbito, para atender a los niños que sufren cáncer o que arrastran secuelas por la enfermedad".

Jerez señaló también que, con ayuda de la formación política Nueva Canarias, Pequeño Valiente ha presentado una proposición no de ley para que los niños que sufren cáncer puedan tener las mismas posibilidades sanitarias con independencia del lugar en el que vivan. "El cáncer no conoce de Comunidades Autónomas", destacó.

Entre los proyectos futuros que tiene la Asociación, se hizo especial hincapié en la reforma de los hospitales en Canarias, la búsqueda de financiación para la mejora de las plantas oncológicas y la proyección de un nuevo centro multidisciplinar, ubicado en la calle Bravo Murillo. En este centro, que atiende a unos 60 niños, se imparten diferentes actividades y se dan las terapias necesarias a los niños que conviven con la enfermedad.

En otras islas como Tenerife, Pequeño Valiente ha visto satisfecha sus demandas para la mejora de las instalaciones del Hospital Universitario, y así brindar más comodidades a las familias durante sus estancias en los centros médicos. En la misma isla, concretamente en Candelaria, tienen en mente levantar un hospital de día. Por otro lado, en Lanzarote, la fundación quiere crear un ciberaula para que los niños vivan de otra forma su estancia en el hospital.

Pequeño Valiente, financiado de forma público-privada, ofrece las ayudas económicas y psicológicas necesarias a las familias de niños con cáncer en situaciones tan necesarias como, el pago de viajes para que los pequeños puedan someterse a los tratamientos necesarios para superar la enfermedad, logopedas, e incluso el costeamiento de los cumpleaños de los pequeños, en los casos más extremos. Como la mayoría de los tratamientos son de alto coste, Jerez volvió a recalcar la importancia de que los organismos públicos financien estas asociaciones puesto que " los tiempos del cáncer no son los tiempos de la política".

La asociación dirigida por José Jerez tiene y costea un proyecto muy importante llamado Último deseo, que tiene como objetivo cumplir con las ilusiones de todos aquellos niños que se encuentran en la fase terminal de la enfermedad.