Juana Rivas, la madre de Maracena (Granada) que incumplió hace más de un mes la orden dada por un juez de dejar a sus dos hijos de 3 y 11 años a su expareja, Francesco Arcuri, entregó ayer a los menores a la Guardia Civil. Rivas, que fue detenida el pasado martes y puesta en libertad provisional, ha llevado a sus dos hijos a la Guardia Civil, horas antes del momento fijado esta tarde en el Punto de Encuentro Familiar de la Junta por el Juzgado de Instrucción 2 de Granada.

La vecina de Maracena finalmente ha acatado la decisión judicial en cumplimiento del auto de la juez instructora que la pasada semana le dio un ultimátum.

Según fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Granada, la entrega de los menores ha tenido lugar alrededor de las 11.30 horas en la Comandancia de la Guardia Civil de Granada.

La mujer, que se instaló en el municipio granadino de Maracena en 2016 al trasladarse desde Italia para huir -según su relato- del maltrato de su expareja, estaba citada ayer a las 17.00 horas en el Punto de Encuentro Familiar de la Junta, en Granada capital.

Dicha citación la acordó el pasado jueves por la tarde el Juzgado de Instrucción 2 de Granada, encargado de la vía penal de la causa y que investiga a Rivas por los delitos de sustracción de menores y desobediencia a la justicia.

La entrega de los menores esta mañana en dependencias de la Guardia Civil se ha producido pasado más de un mes desde que Rivas incumpliera la orden del Juzgado de Primera Instancia 3 de llevar a sus hijos al mismo punto en el que estaba citada para esta tarde.

La juez argumentó que la entrega respondía al cumplimiento de las resoluciones judiciales firmes y advirtió además de que, en caso de que no la acatara, se adoptarían las medidas cautelares que, vista la gravedad de los hechos investigados, se requirieran.

Esta misma semana el Juzgado encargado de la vía penal ha citado a declarar como investigadas a la asesora jurídica del Centro Municipal de la Mujer de Maracena, Francisca Granados, y a la psicóloga de este mismo centro, Teresa Sanz. Las dos deberán comparecer el próximo miércoles por su presunta intervención como "inductoras o partícipes necesarios" en la sustracción de los dos menores.

Un día después tendrán que declarar los familiares de Juana Rivas, hasta segundo grado de consanguinidad, también en calidad de investigados y por su presunta intervención en el mismo delito de sustracción de menores.

Una vez, los hijos de Rivas fueron entregados por su madre, su expareja, Francesco Arcuri, recogió a los dos hijos que tiene con la vecina de Macarena en las dependencias citadas.

La expareja de Juana Rivas afirmó que sus dos hijos se encuentran bien y tranquilos después de que su madre, investigada por los delitos de sustracción de menores y desobediencia a la justicia, los haya entregado finalmente ante la Guardia Civil.

Así lo ha explicado a Efe Adolfo Alonso, el abogado del padre, Francesco Arcuri, quien abandonó las dependencias de la Guardia Civil acompañado de sus hijos, de 11 y 3 años, a los que Juana Rivas ha llevado hasta esta sede del cuerpo armado de manera anticipada y voluntaria.

El letrado ha apuntado que el intercambio de los menores entre los progenitores se ha desarrollado de acuerdo a lo previsto y ha subrayado la labor de la Guardia Civil, que ha facilitado que los niños se marchen con el padre sin haberse visto sometidos a la presión mediática.

El abogado de Arcuri, la expareja de Juana Rivas y que tiene fijada su residencia en Italia, ha detallado que al principio, los niños, y especialmente el mayor de los hermanos, estaban algo inquietos, pero que se han ido calmando.

Ha apuntado también que el reencuentro de los menores con el padre ha sido "normal" y que han vuelto al nivel que existía antes de que Juana Rivas viajara desde Italia a España con los niños en 2016.

"Los niños están tranquilos y bien", ha apuntado Alonso, que ha recalcado que Arcuri da así por terminado el proceso para recuperar a sus hijos.

Francesco Arcuri abandonó las dependencias policiales pasadas las tres de la tarde y después de que Juana Rivas acudiera de manera voluntaria con los menores en la Guardia Civil sobre las 11.30 horas de hoy.

El intercambio de los niños, con el que Rivas ha acatado las sentencias judiciales que la obligaban a entregar a los hijos con su padre, ha evitado que este proceso se desarrollara en el Punto de Encuentro Familiar, como había fijado para las 17.00 horas de ayer por la tarde y en un auto la titular del Juzgado de Instrucción 2 de Granada.

Este mismo juzgado ya acordó , cuando citó a las dos partes de la expareja sin que Juana Rivas compareciera en la sede judicial, que los niños tenían que ser entregados al padre en cuanto fueran localizados y que debía hacerse de manera inmediata y "sin excusa" por parte de la mujer que ahora se enfrenta a un delito de sustracción de menores y desobediencia.