Más allá del glamour y el reconocimiento que otorga ganar una estrella Michelin, detrás de estos galardones hay esfuerzo, trabajo duro y mucha dedicación. Así lo confirmó la chef Fernanda Fuentes, que ayer ganó su primera estrella gracias a su trabajo en el restaurante Nub de La Laguna, que regenta junto al cocinero Andrea Bernardi. "Es un premio a las más de 16 horas que pasamos trabajando juntos, hay días que solo nos falta dormir en el restaurante", afirmó.

Esta chef señaló poco después de saber que había conseguido la sexta estrella Michelin para Tenerife, que cuando un cocinero logra abrir su propio restaurante "solo puedes aspirar a los reconocimientos".

Tanto ella como Bernardi argumentaron que el secreto de Nud es "el amor y la pasión que le ponemos a lo que hacemos". "Mimamos muchos a nuestros clientes y eso lo agradecen", comentó.

Después de haberse enterado de que habían logrado esta prestigiosa distinción gastronómica, la pareja aseguró sentirse muy contentos, aunque no podían disimular los nervios, ya que si bien en los últimos días habían escuchado rumores de que podían obtener este galardón "nunca te lo esperas, y es mejor cuando es una sorpresa".

Bajo su punto de vista, la estrella Michelin que se va directa al municipio de La Laguna actuará como un revulsivo que atraerá a más turístico gastronómico a la ciudad de los Adelantados. "Espero que también sea un aliciente para el resto de los cocineros, que les de más ganas de trabajar para que puedan cumplir su sueño y llegar a las estrellas", resaltó. Lo que ellos sí esperan es que se disparen las reservas en el restaurante después de obtener este galardón. "De hecho creo que ya está sonando el teléfono", bromeó Fuentes.

Otro de los que ayer estuvo de enhorabuena fue Jordi Cruz, el chef del restaurante ABaC en Barcelona y también presentador del conocido programa de televisión Masterchef logró anoche hacerse con su tercera estrella Michelin.

El cocinero manifestó estar feliz no solo por él sino también por su equipo que "se lo merece y siente el peso de esa responsabilidad".

Cruz resaltó que haber ganado esta distinción lejos de presionarlo más, le animaba a seguir trabajando como hasta ahora. "Me viene muy bien, porque yo me paso el día en el restaurante aunque la gente me vea en la tele, yo soy cocinero de médula y tengo que estar siempre en mi casa", aseguró.

El chef afirmó que no hay manera de engañar a los inspectores de la guía. "Ellos vienen y ven si el trabajo está realizado y yo estoy súper tranquilo de lo que hacemos en mi casa", argumento.

La gala, que acogió ayer el hotel Ritz Carlton Abama, puso a Tenerife en el mapa de la gastronomía nacional, algo que destacaron todos los mandatarios regionales e insulares que acudieron al evento en el que resaltaron la excelencia culinaria de la Isla.