La Casa de Canarias de Madrid, fundada en el año 1953, ha tenido que mudarse al famoso barrio de Malasaña, una vez que el Gobierno de Canarias, propietario del inmueble que llevaban utilizando desde hace 20 años, y que se encuentra cerca del Congreso de los Diputados, haya decidido utilizar estas instalaciones para el personal de la Administración insular que se encuentra desplazada en la capital.

Para el presidente de la Casa de Canarias, Roberto Miño, es "una pena que hayan tomado esta decisión, que aceptamos, pero como no queríamos quedarnos sin un local en Madrid, sobre todo con la aceptación que está teniendo todo lo que hacemos, hemos optado por buscar una alternativa y seguir con nuestras actividades".

Y para celebrar este cambio de local y de barrio, hoy sábado, a partir de las dos de la tarde, se ha organizado una 'Gran Quedada Canaria'. Los socios de la entidad confían en que esta fiesta se convierta en un acto multitudinario, que tendrá lugar en sus nuevas instalaciones de la calle San Hermenegildo 32, en Malasaña.