El Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín decidió la noche del lunes habilitar durante las 24 horas del día y los 7 días de la semana la unidad de transición, planta con 30 camas de capacidad destinada a los pacientes a la espera de una plaza libre para ingresar en un centro sanitario, con el objetivo de "desahogar" el servicio de urgencias, según informaron ayer desde el complejo de referencia del norte grancanario.
La decisión se adoptó tras el lleno sufrido en urgencias durante el pasado puente festivo y se mantendrá durante un tiempo indefinido, es decir, hasta que ceda el pico de presión asistencial derivado del repunte de enfermedades invernales como la gripe. A lo largo de las últimas semanas, la caída de las temperaturas junto a la aparición de calima empeoró a los pacientes de patologías respiratorias, en su mayoría de la tercera edad, con el resultado de la saturación de las urgencias en el Negrín, cuyos responsables también decidieron el lunes convocar dos reuniones diarias para conocer la evolución del servicio.
"La planta de transición estaba funcionando de lunes a viernes y de 8 a 20, pero así no sirve, el problema suele ser los fines de semanas, cuando hay mucha demanda y no se dan altas hospitalarias, hay que gestionar de lunes a lunes y de 8 a 8, no a 15 o a 20, el lunes a las 11.30 horas había 15 personas pendientes de ir a las clínicas concertadas, un embudo, a veces puede pasar una semana hasta que tienen un hueco", explicó ayer la delegada del Sindicato de Enfermería (Satse) en el Doctor Negrín, María José Santana, tras recordar que el hospital se centra en pacientes agudos mientras que los centros sociosanitarios o residencias geriátricas atienden los enfermos crónicos o ancianos. A su juicio, "la población está envejeciendo, pero no tenemos espacio".
El gerente del hospital norteño, Pedro Rodríguez, ya adelantó el lunes la iniciativa de la planta de transición al informar de "proyectos para disponer de otros recursos donde situar a los pacientes en lo que son dados de alta o se trasladan", en alusión a las actuales carencias materiales y humanas del Doctor Negrín. De hecho, el directivo hospitalario también anunció entonces la contratación de un médico para urgencias la pasada semana y la inminente incorporación de otro profesional para el servicio.
"Me parece muy bien que contraten médicos, pero no sirve si no hay más enfermeros para realizar las pruebas solicitadas o no abren habitaciones y boxes para atender a los pacientes, falta muchísimo personal de enfermería", destacó la representante del Satse antes de cifrar de 5 a 10 profesionales nuevos las actuales necesidades del servicio de urgencias. Según María José Santana, los ratios de atención "no se cumplen, se sobrepasan, por ejemplo, el lunes tuvieron hasta cuatro paciente en la unidad de críticos por enfermero".
Tras la apertura de la unidad de transición, el colectivo de trabajadores Mueve el Negrín argumentó que "el colapso de urgencias no se genera en el servicio, se origina en la errónea política de concertación y privatización que está adoptando el Servicio Canario de la Salud" (SCS). Con las etiquetas #MartesPrivatizacion y #NoSeremosCómplices en Twitter y Facebook, la reciente plataforma laboral continuó que "la actual política sanitaria en las Islas parece llevar una esfera mercantilista, pudiéndose nombrar como una política con ánimo de lucro al estar basado su modelo en el aumento de la colaboración con empresas externas al sistema sanitario".
Para el gerente del hospital grancanario, Mueve el Negrín "es un colectivo que merece todo mi respeto y ya me compremetí la pasada semana a reunirme para conocer de primera mano sus reclamaciones". En definitiva, "quiero escuchar a la plataforma, si tienen algo que aportar, encantado", subrayó a principios de la semana Pedro Rodríguez tras las denuncias públicas del colectivo laboral, una estrategía similar a la actuación en redes sociales digitales realizada por los profesionales del servicio de urgencias del madrileño Hospital Universitario La Paz.
Aunque admitió la carencia de personal, el director gerente del Negrín negó la falta de recursos materiales en urgencias, cuya saturación atribuyó a una combinación de múltiples factores como el frío y los festivos.
