A las 16.45 horas, hora peninsular, una ambulancia medicalizada irrumpió en el Hospital 12 de Octubre de Madrid. Por fin, tras varios días de espera y numerosas vicisitudes, el joven grancanario afectado de neurofibromatosis tipo 2, Ramsés de la Nuez, pudo subir a bordo del vehículo de emergencias para cumplir su sueño de regresar a la Isla. De la Nuez se encontraba ingresado desde el pasado 21 de mayo en el centro sanitario madrileño para someterse, dos días después, a la que sería la decimocuarta intervención quirúrgica desde que conociera el diagnóstico de la patología. "Mi hijo lleva desde el viernes esperando que lo vengan a buscar. Apenas puede hablar, pero después de haberle dicho que por fin había llegado el día que íbamos a volver a casa, no ha parado de preguntarme la hora con la voz entrecortada", expresó con emoción su madre, Ana de la Nuez.

Alrededor de las 17.00 horas, la ambulancia que transportaba al joven de 25 años llegaba al aeropuerto de Madrid-Cuatro Vientos. Allí, le esperaba un avión completamente equipado que lo llevaría hasta el aeropuerto grancanario de Gando. "Desde las 13.00 horas, le han quitado la sonda nasogástrica, porque según me ha dicho el equipo médico tiene que estar sin comer. No me permiten viajar con él y tendré que coger un vuelo más tarde, pero estoy tranquila porque esta noche estará donde quiere estar", indicó Ana de la Nuez.

La última operación a la que ha sido sometido Ramsés ha consistido en una intervención craneal que ahora mismo le impide comunicarse con fluidez. "Mi hijo lleva sufriendo esta enfermedad desde los siete años. Se vio obligado a aprender a leer los labios desde que perdió el sentido del oído en el año 2016. Pero ya en 2009 había perdido por completo la audición del oído izquierdo. El pasado mes de febrero fue intervenido de otros dos tumores craneales y nos dieron muy pocas esperanzas, pero salió adelante". "Ahora estoy preocupada", prosiguió, "porque sé que quiere decirme algo, y no logro comprender muchas palabras de las que dice. Solo puedo decir que permanece consciente y sabe todo lo que está pasando a su alrededor".

A las 19.45 horas, el avión del SUC aterrizaba por fin en el aeropuerto de Gando, donde aguardaba otra ambulancia medicalizada dispuesta a trasladarlo a la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital Universitario Insular de Gran Canaria, lugar donde se encontraban esperándolo sus familiares. "En realidad, mi hijo nunca ha querido estar en paliativos, sin embargo, no queda otro remedio y tiene que permanecer ingresado en esa unidad", expresa su progenitora con resignación.

El traslado de Ramsés a la Isla estaba previsto para el pasado viernes. Sin embargo, por motivos privados, no pudo efectuarse. Para lograr el objetivo que por fin han podido cumplir, el entorno familiar del paciente puso en marcha el pasado fin de semana una campaña en las redes sociales para solicitar ayuda y que pudiese regresar a su tierra. "Mi hijo ya estaba desesperado. No había día que no me preguntara la fecha de nuestro regreso. Para él no es fácil estar lejos, a pesar de que tiene su historial en el hospital madrileño desde los siete años", cuenta Ana de la Nuez.

Según anunció su madre, desde el año pasado, el joven se encuentra en silla de ruedas como consecuencia de un tumor en la cervical del que también fue intervenido. "En ese momento mi hijo empezó a valorar el hecho de haber podido caminar durante todo ese tiempo. Es cierto que se derrumbó cuando perdió por completo la audición, y pasó mucho tiempo sin salir de casa. Al no poder caminar, se dio cuenta de que no hay que desaprovechar ni un solo minuto. Se armó de valor y salió adelante porque es un auténtico luchador", señaló orgullosa su progenitora, que además siempre ha estado a su lado en todas las consultas médicas que ha tenido a lo largo de su vida.

Fortaleza

A pesar de todas estas adversidades, Ramsés siempre ha conservado un gran espíritu de lucha. Para hacerse una idea, basta con visitar su perfil alojado en la red social Instagram ( @delanuez_ramses), donde están publicadas numerosas entradas cargadas de optimismo y ganas de vivir. "Ramsés siempre ha tenido una actitud muy positiva. Todos los que sabemos su historia lo consideramos un verdadero héroe", apostilló su progenitora, minutos antes de coger el vuelo desde el aeropuerto de Madrid-Barajas Adolfo Suárez, que la llevaría junto a su hijo.

La neurofibromatosis tipo 2 es una patología genética que afecta principalmente al sistema nervioso y que concede a los individuos que la padecen un mayor riesgo a desarrollar diferentes tumores dentro de los nervios. Siguiendo esta línea, el tipo de tumor más frecuente es el neuroma acústico, que se desarrolla a lo largo del nervio auditivo. Asimismo, se pueden producir neoplasias en otras partes del cuerpo como el cerebro, la médula espinal, e incluso, el ojo.

En el caso de Ramsés de la Nuez, sin embargo, no existen evidencias de antecedentes familiares que hayan padecido esta afección. "Las explicaciones que nos dieron los médicos en su momento es que en uno de cada 40.000 niños se da la circunstancia que la presencia de un gen espontáneo induce la manifestación de la enfermedad, y Ramsés es uno de ellos", lamentó Ana de la Nuez.