"El uso del lenguaje genérico perjudica siempre a las mujeres, y no les concede ningún tipo de visibilidad", afirma Ángeles Mateo del Pino, docente de Filología de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), y ex directora de la Unidad de Igualdad de la institución educativa. En este sentido, la docente garantiza que todo lo que sea emplear un lenguaje sexista "contribuye a la desigualdad entre hombres y mujeres". Asimismo, advierte que el uso del masculino genérico, no solo invisibiliza a las féminas, "sino que arrastra a la sociedad a realizar una distinción entre la figura de hombre y de la mujer, en el que esta última siempre es la perjudicada".
Para evitar contribuir con esta mala práctica, Mateo del Pino propone "economizar el lenguaje", y obviar el uso de sustantivos femeninos y masculinos cuando se desea hacer referencia a ambos géneros. "Como ejemplo podríamos citar palabras como ciudadanía, en lugar de ciudadanos o ciudadanas, o equipo decanal, en vez de hablar de decanos y decanas", comenta la filóloga. Y.M.
"Llamar a las mujeres por su nombre en un oficio es una muestra de familiaridad"
"Para cambiar el lenguaje es preciso modificar primero
la realidad"
"Siempre se respeta más a un hombre en un puesto de poder que a una mujer"