La mejor solución para Canarias en la revolución de los relojes que se plantea en Europa y España es que siga con una hora menos que la Península. Esa es la opinión de los expertos si finalmente se aplica la variación en el huso horario que el Gobierno de Pedro Sánchez ha anunciado que va a debatir. La propuesta de actualizar el huso horario no es nueva pero ha vuelto a la actualidad después de que la Comisión Europea planteara otra variación: la eliminación de los dos cambios horarios que se aplican en verano (+1) e invierno (-1).

En lo que respecta al debate español del huso horario hay tres opciones posibles: una, que la Península tenga una hora menos que la actual y Canarias también; otra, que la Península reduzca una hora pero Canarias no; y la tercera, que los husos horarios sigan igual que como está ahora. En lo que todos los expertos coinciden es en que el actual modelo nacional horario es erróneo.

El 16 de marzo de 1940, la España peninsular y balear dejaba de regirse por el horario que le correspondía. La simpatía que el dictador Franco sentía por Hitler hizo que hasta cambiara el huso horario del país, excepto Canarias, para acercarse más a Alemania e Italia.

Los españoles pusieron en el reloj la hora nazi, cuando la que le correspondía era la que tenía antes de 1940. Setenta años después aún no se ha corregido esta decisión, que provoca desfases horarios en verano de hasta dos horas en relación con el horario solar.

El Gobierno socialista está "bastante de acuerdo" con la propuesta de la Comisión Europea de eliminar el cambio de hora que se produce dos veces al año en los países europeos, aunque no se ha decantado todavía por mantener el actual horario de verano o el de invierno. Al mismo tiempo, ha anunciado que creará un comité de expertos para revisar si sería necesario recuperar el huso horario natural, lo que precisaría también una decisión sobre la situación excepcional del Archipiélago canario. En este caso, estas serían las tres opciones antes comentadas y sus consecuencias:

Una hora menos

Si Canarias reduce una hora sobre su actual huso horario, estas serían las consecuencias: salida del sol en verano alrededor de las 5:45 horas sin cambio horario europeo de verano (es decir, sin el adelanto de principios de primavera), 6.45 con cambio horario. La puesta de sol en verano, alrededor de las 18.30 horas sin cambio horario europeo, y 19:30 con cambio horario europeo. La salida de sol en invierno sería a las 7.40 horas sin cambio horario invernal -sin el retraso de una hora a finales de octubre-, 6.40 con cambio horario. La puesta de sol en invierno, a las 18.10 horas, y 17.10 con cambio horario.

Esta opción pasaría por reducir una hora tanto en la Península como en Canarias. Los relojes canarios deberían marcar, pues, una hora menos de la que tienen en la actualidad. El Archipiélago, por su posición geográfica, tendría que regirse por el huso GMT -1, no por el GMT actual, un horario que recuperaría si se eligiese la propuesta que incluyeron en 2016 el Partido Socialista y Ciudadanos en un acuerdo de Gobierno que no prosperó. Canarias dejaría de tener así la misma hora que Londres, porque el meridiano de Greenwich pasa por el Archipiélago. Tiene ventajas e inconvenientes. Por ejemplo, sin el cambio horario europeo amanecería a las 5.45 horas y atardecería a las 18.30, mientras en invierno sería a las 7.40 y 18.10 horas.

La misma hora

Si Canarias se queda en el mismo huso actual, mientras la Península reduce una hora, estas serían las consecuencias: salida de sol en verano: alrededor de las 6.45 horas sin cambio horario europeo de verano, 7:45 con cambio horario. Puesta de sol en verano: alrededor de las 19.30 horas sin cambio horario europeo y 20.30 con cambio horario europeo. Salida de sol en invierno: 8.40 horas sin cambio horario europeo invernal, 7.40 con cambio horario. Puesta de sol en invierno: 19.10 sin cambio horario europeo y 18.10 horas con cambio horario.

La segunda opción pasa porque Canarias mantenga el mismo huso horario actual pero la Península reduzca una hora y recupere el huso más lógico. De esta manera, el Archipiélago perdería sobre todo por una razón: la enorme promoción indirecta que recibe cada vez que en los espacios televisivos y radiofónicos a nivel nacional se dice eso de "una hora menos en Canarias". Y es una frase muy habitual en estos espacios, especialmente en los informativos.

De esta manera, amanecería en verano sin el cambio que se aplica en Europa a las 06:45 horas, mientras atardecería a las 19:30. Es previsible, como ya ha quedado claro en otras ocasiones en las que se ha debatido esta circunstancia, que el Archipiélago luche porque no salga esta posibilidad para mantener esa distinción con respecto al resto del país que tanto defiende. Las Islas no desean perder la muletilla de "una hora menos".

Todo queda igual

Los horarios en Canarias serían los mismos que en el caso anterior. Lo que cambiaría en este caso es que el Archipiélago seguiría una hora menos y la Península, una más. El Gobierno de Pedro Sánchez ya ha anunciado que antes de adoptar una decisión, la someterá primero a un comité de expertos y, después, al máximo consenso de los grupos políticos y la sociedad.

La propuesta de cambio horario no es un debate nuevo. En diciembre de 2016, Fátima Báñez, entonces ministra de Empleo, propuso un pacto para facilitar que la jornada laboral terminara a las seis de la tarde, propuesta que incluía estudiar el cambio de huso horario. No se ha tomado ninguna decisión desde entonces ni se profundizó en el proyecto.