La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha decretado el aviso amarillo por lluvias para el este jueves, 25 de octubre en la totalidad de las islas de Gran Canaria, Lanzarote, Fuerteventura y Tenerife. Esta previsto que las lluvias y el viento comiencen a partir de las 03.00 horas del mismo jueves y finalicen, en un primer momento, a las 16.00 horas del mismo jueves.

Previsión de la Aemet para estos días

Una borrasca atlántica situada, este miércoles, al sur de Azores se profundizará y desplazará hacia Canarias durante los próximos días. Simultáneamente, la entrada de aire más cálido y húmedo, de origen subtropical, contribuirá a que las precipitaciones sean intensas y localmente persistentes.

El jueves será el día más adverso, con chubascos y tormentas localmente fuertes (15-20 mm en una hora) y persistentes (40-60 mm en 12 horas) en todo el archipiélago, con mayor probabilidad en las islas orientales.

Durante el viernes la borrasca, ligeramente menos intensa, se situará al oeste de Canarias, a la vez que la masa de aire subtropical se desplazará hacia el este y noreste, afectando a la mitad oriental del archipiélago y penetrando en el cuadrante suroeste peninsular. Continuarán los chubascos y tormentas en Canarias, menos frecuentes que el jueves, pero todavía localmente fuertes y persistentes; y afectarán también al suroeste peninsular, principalmente al valle del Guadalquivir y sobre todo a los litorales de Cádiz y Huelva, donde podrían ser muy fuertes.

Además, durante el viernes por la tarde y el sábado un frente frío muy activo recorrerá la Península y Baleares, de noroeste a sureste, dejando a su paso lluvias y chubascos generalizados, más intensos y frecuentes en la mitad norte y zona centro peninsular y poco probables en el extremo sureste. El frente también llegará a Canarias y contribuirá a mantener las precipitaciones en el archipiélago durante varios días, que podrían ser fuertes en las vertientes norte de las islas. Durante el fin de semana y el lunes, la cota de nieve bajará hasta los 1000 metros y ocasionalmente hasta los 700 m, dando lugar a las primeras nevadas de importancia en el norte peninsular y, en menor medida.