El peor dato de las listas de espera del Servicio Canario de la Salud (SCS) durante 2018. La demora media para una prueba complementaria descendió el pasado año en 21 días, un 14% con respecto al año anterior, pero el número de ciudadanos pendientes de ecografía, endoscopias o ecocardiograma se desbocó un 27,4%, es decir, 6.065 pacientes más hasta situarse en 28.124 personas el último 31 de diciembre, según los datos difundidos esta semana en la web de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias.
"Si resolvemos unas necesidades, surgen otras más; en concreto, si diagnostico más, aparecerá más gente en la espera quirúrgica, si logro más pruebas complementarias, generan más consultas, es un circulo", explicó el pasado martes el director del SCS, Conrado Domínguez, al presentar el balance anual junto al consejero de Sanidad, José Manuel Baltar. Durante 2018, la lista de espera quirúrgica en los hospitales públicos isleños disminuyó un 14,1% (4.049 pacientes menos) hasta fijarse en 24.629 ciudadanos pendientes de una operación, con una mejora de un mes y casi una semana (36,8 días) en los plazos hasta situar la demora media en 139,8 jornadas.
Por el contrario, aumentaron un 0,3% (400 más) con respecto a 2017 las personas que aguardaron por una primera consulta en una especialidad médica hasta un total de 132.667 pacientes. Menos gente pendiente de ingresar al quirófano, por tanto, pero más tanto para acudir a la consulta de especialidad como para someterse a una prueba complementaria, luces y sombras en el principal cómputo anual de la sanidad pública canaria.
Mejor en Gran Canaria
En pruebas complementarias contabilizaron los mayores incrementos los hospitales universitarios Materno Infantil de Canarias y Doctor Negrín de Gran Canaria, con alzas del 191,4% (161 pacientes más) hasta 337 en total y del 123,3% (2.091 más) hasta 3.786 ciudadanos. Sin embargo, el tercer hospital de referencia en la isla capitalina oriental, el Hospital Universitario Insular de Gran Canaria, mejoró su lista de espera para pruebas complementarias, con una reducción del 11,3% (231 menos) hasta un global de 1.801 usuarios pendientes de algún estudio diagnóstico.
Una de cal y otra de arena también en los centros terciarios de Tenerife, ya que el Hospital Universitario de Canarias (HUC) disminuyó su lista de espera un 2,2% (212 ciudadanos menos) hasta 9.231 en total y Nuestra Señora de Candelaria elevó un 57,5% (4.382 más) hasta 12.000 personas pendientes de resonancia, tomografía o mamografía, la mayor acumulación en un complejo público isleño. De hecho, la isla capitalina occidental concentró el 75% (21.231 usuarios) de la lista espera de pruebas complementarias en el conjunto del Archipiélago frente al 21% (5.924 pacientes) de Gran Canaria.
Entre las siete pruebas complementarias analizadas por el SCS destacaron las subidas en la lista de espera para someterse a una resonancia nuclear magnética, con un crecimiento del 213,5% (1.597 personas más) hasta un total de 2.345 ciudadanos pendientes y una demora media de 114,9 días (2,9 menos); ecocardiogramas, con un alza del 47,1% (1.228 más) hasta 3.835 usuarios y un retraso de 138,29 fechas (41,7 menos); y mamografía, con un aumento del 43,3% (309 más) hasta 1.021 pacientes y 95,78 jornadas (5,4 menos). A continuación se situaron los ascensos de ecografía, con un 30,1% (3.161 personas más) hasta 13.655 en total y una demora media de 122,1 días (5,9 menos); y ergonometría, con un 8,5% (69 más) hasta 878 ciudadanos y 72,91 jornadas (68,1 menos).
Más gente a la espera de una prueba diagnóstica, aunque menos días de demora administrativa, en concreto, tres semanas menos en los hospitales del SCS.
