Canarias se coloca como la segunda comunidad autónoma con un mayor índice de disoluciones matrimoniales por habitante, aunque cerró 2018 con una cifra de rupturas menor que la registrada en el año anterior: 5.241. Esta dato supone que los juzgados del Archipiélago suman casi 15 demandas de separación o divorcio al día.

Así se revela en el último informe del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que sitúa en un 10,85% la diminución de demandas de disolución matrimonial en el último año, al pasar de las 5.879 de 2017 a las 5.241 de enero a diciembre del pasado 2018. Se sigue de esta manera la tendencia a la baja marcada en las estadísticas canarias durante la última década, hasta tal punto que las rupturas han caído desde 2008 a la actualidad en casi un 29%.

Con estos datos, el Archipiélago se sitúa como la segunda región en rupturas. El informe del órgano judicial calcula que el mayor número de demandas de disolución por cada 10.000 habitantes se dio en la Comunitat Valenciana, con 27,9; seguida de Canarias, 26,7 e Illes Balears, con 25,6. Por encima de la media nacional, que se fija en 23,9, se encuentran también Andalucía (25,2), Cataluña (25); y Asturias, (24,1). Por el contrario, las más bajas, se dieron en Castilla y León, 18,6; País Vasco, 19,1; y Aragón, 20,6.

Por tipos, la población isleña sigue prefiriendo la fórmula del divorcio frente a las separaciones, mientras que las nulidades apenas tienen impacto en el global. En ese sentido, el texto del Consejo General del Poder Judicial cifra en 5.067 los divorcios registrados en Canarias, frente a apenas 169 separaciones y solo cinco nulidades.

Todas ellas han descendido respecto al ejercicio anterior, aunque a la inversa; es decir, caen más las nulidades(en torno al 16 % al pasar de seis a cinco) y las separaciones (un 14% al caer de 197 a 169), que los divorcios, que protagonizan una disminución del 10,73% en un año. Eso sí, atendido a las cifras de la última década, la caída en el caso de separaciones se mantiene en las mismas cantidades, mientras que el descenso es más acuciado en el caso de los divorcios.

Disminución

Este tipo de disolución matrimonial acumula una disminución en diez años del 29,34%, ya que en 2008 los divorcios alcanzaron a 7.171 parejas frente a las 5.067 que rompieron con esta fórmula su matrimonio. La caída es igualmente relevante en el caso de las nulidades, que han pasado de 12 hace diez años a apenas cinco el pasado 2018, si bien se trata de una fórmula que durante los últimos diez ejercicios ha registrado más altibajos.

En cuanto a la distribución del total en función del acuerdo entre las partes o la ausencia del consenso, llama la atención que cada vez se producen más rupturas en el Archipiélago con pacto entre el matrimonio: casi seis de cada diez se resuelve sin conflicto.

En concreto, los juzgados de Canarias registraron el año pasado un total de 3.109 disoluciones en las que la pareja ya tenía acordadas las medidas de la ruptura, frente a las 2.127 en las que tuvieron que mediar los tribunales. De estas cifras se desprende una caída respecto al año anterior en los procedimientos resueltos sin consenso, que ese año supusieron el 46% frente al 40% del pasado 2018.

Atendiendo a los datos globales del informe, es aún más llamativo el hecho de que si bien ambas fórmulas descienden, la caída es mucho mayor en el caso de las disoluciones sin acuerdo. Así, la disminución de las disoluciones de mutuo acuerdo es de apenas un 1,55%, al pasar de 3.158 a 3.109, mientras que en el caso de las resoluciones sin consenso caen un 22,66% respecto a las 2.715 de hace un año.

A ellas se sumarían la fijación de guarda y custodia de los hijos, un trámite que durante el año pasado sumó en Canarias un total de s 1.985 informes sin consenso, un 7% menos que los 2.139 del año anterior. Además, se iniciaron 2.582 procedimientos para modificación de medidas y la mayoría (1.924) se resolvieron sin acuerdo.