El Colegio de Médicos de Las Palmas ha expresado su apoyo a la denuncia formulada por 23 especialistas del servicio de Urgencias del Hospital Insular de Gran Canaria por la situación de saturación en la que desempeñan su trabajo y ha instado al Gobierno y al Cabildo a ponerle remedio.

Los firmantes de esa queja, que se ha presentado tanto ante el Colegio de Médicos como ante la Fiscalía, denuncian que en las Urgencias de su hospital se viven situaciones "inadmisibles" de "colapso y caos asistencial", con "masificación" y pacientes dados de alta sin recursos sociales que terminan quedándose allí.

El Colegio de Médicos advierte de que la "falta de intimidad" a la que se somete a los pacientes en esas condiciones en las Urgencias del Insular constituye un "atentado a su dignidad no admisible en el seno de una sociedad desarrollada".

Este organismo profesional considera además que se están vulnerando los derechos laborales de los sanitarios y que trabajar en esas condiciones puede provocar errores médicos, de los que hace responsable a la administración.

"La atención de urgencias exige a los médicos un proceso intelectual ágil para discernir entre diferentes diagnósticos y acciones terapéuticas y esta labor es muy difícil de desempañar entre un laberinto de camillas, quejidos, lamentos y reclamaciones", afirma el Colegio de Médicos.

Además, alerta de que esas condiciones están generando un ambiente crispado en urgencias, que se vuelve contra los profesionales sanitarios en forma de "agresiones verbales y físicas".

"No entendemos cómo se ha permitido llegar a esta situación. No importa que la asistencia sanitaria dependa de la Consejería de Sanidad, que la dependencia sea competencia de la Consejería de Empleo y Políticas Sociales, ni que las plazas socio-sanitarias dependan del Cabildo. Todos son Gobierno. Y, por tanto, todos tienen su parte de responsabilidad", subraya.