La gran apertura de campo del Telescopio de Treinta Metros (TMT), combinado con sus sistemas de óptica adaptativas dotarán a la investigación del espacio de nuevas herramientas con las que se espera que se puedan resolver mucho de los misterios actuales de la ciencia. En el informe detallado sobre la ciencia del TMT, editado en 2015, se expone que la observación con este telescopio permitirá a los investigadores responder algunas de las "grandes preguntas" o preguntas que han estado asediando el conocimiento humano desde décadas.Materia

Así, con esta nueva resolución, los investigadores podrán tratar de entender mejor la composición del universo, concretamente la naturaleza de la materia y la energía oscura que comprenden el 95% de los ingredientes que forman el mundo que nos rodea; o intentar resolver la mayor duda de la historia: ¿estamos solos?

Asimismo, se configurará como una ventana para ver qué hay más allá del Big Bang. Este instrumento "representa la posibilidad de llevar nuestra visión más lejos en el espacio y nuestra comprensión más atrás en el tiempo para ayudar a responder preguntas fundamentales sobre el universo", como explica el propio consorcio. El instrumento dará servicio a prácticamente todas las líneas de investigación.