Bartolomé ya se temía lo peor cuando los minutos se iban llevando la vida de su hijo Aitor. En una parte de los audios de la conversación con el 112 se le escucha decir angustiado a un médico: "Se nos muere, ¿eh? Se nos muere". Su dolor, casi dos años después, se ha convertido en indignación. "Me siento abandonado totalmente, me siento indefenso". Sobre todo por el trato del médico y también por el tiempo perdido. Su abogado asegura que los seis minutos que se tardó en realizar la valoración técnica fueron decisivos. De falta de humanidad habla también el consejero de Sanidad de Madrid, quien asegura que se investigarán los protocolos de actuación. Bartolomé y Carmen nunca olvidarán los valiosos minutos que pudieron salvar la vida de su hijo.

El diario El Mundo publicó este jueves la surrealista conversación entre el médico del Summa 112 y la mujer:

  • Madre: Mire, es que se ha levantado el chico y se ha mareado al levantarse. Yo estaba en la cocina y le he sentido caerse
  • Médico: Sí
  • Madre: Y entonces un sudor enorme... Ahora se ha quedado más bien frío, pero con un sudor enorme.
  • Médico: ¿Él está en tratamiento de algo?
  • Madre: No, no.
  • Médico: Ha tenido un síncope entonces.
  • Madre: Y está como, como... Dice que no puede respirar.
  • Médico: Vale. Pásemelo al teléfono, por favor.
  • Madre: A quién: ¿al chico?
  • Médico: Claro.
  • Madre: No puedo, no puedo.
  • Médico: Es que tiene que hablar con el médico. ¿No tiene un móvil, y la llamo yo?
  • Madre: ¡Si él no puede, si él está en la...!
  • Médico: Señora, si estuviera en el hospital ahora mismo un médico allí, ¿tendrá que hablar con él o no?
  • Madre: Bueno, pero usted...
  • Médico: Da igual que sea por teléfono o lo que sea, tiene que hablar con el médico.
  • Madre: Él dice que no puede respirar y que...
  • Médico: Bueno, ya, pero yo necesito evaluarlo. Señora, porque él puede necesitar una UVI, puede necesitar un ingreso hospitalario o puede necesitar un médico...
  • Madre: Mira, que dice el médico que tienes que hablar con él, que a ver lo que te pasa...
  • Médico: Dígame, qué te ocurre, cuéntame un poquito.
  • Aitor: Me ahogoooo...
  • Médico: Yo no te escucho que te ahogues. ¿Has estado nervioso o algo?
  • Aitor: Noooo [sin poder vocalizar]...
  • Médico: Entonces, ¿estás en tratamiento de alguna cosa?
  • Aitor: No puedooo... Me ahogoooo...
  • Médico: A ver, pásame a tu mamá.
  • Aitor: No puedooo...
  • Médico: Pásame a tu mamá.
  • Madre: Mire usted como está.
  • Médico: No, respira perfectamente. ¿Está a tratamiento psiquiátrico de algo?
  • Madre: No, no, de nada [se oye de fondo a Aitor gritar: "Me ahogoooo, no puedoooo"].
  • Médico: ¿De nada? ¿Ha tomado alguna d... Alguna...?
  • Madre: No, mire, si ayer ni salió ni nada, estuvo aquí en casa metido todo el día...
  • Médico: Bueno, irá un médico a verlo y tendrá lo que sea, no lo sé, pero ¿no puede ser que haya tomado algo?
  • Madre: No, no...
  • Médico: ¿Algún medicamento o algo?
  • Madre: No.
  • Médico: Pues respira perfectamente, ¿eh? Que respira perfectameeente...
  • Madre: Pues él dice que no puede respirar.
  • Médico: Él dice lo que quiera, pero respira perfectamente porque habla perfectamente, ¿vale?
  • Madre: Pues mire usted yo no sé lo que...
  • Médico: Bueno, irá un médico a verlo, pero él sí respira...
  • Madre: Yo no sé...
  • Médico: Sí, respira. Venga. Hasta luego. Parece más bien que está tocado de algo. No sé. Vamos a ir a verlo. Venga, hasta ahora.

Aitor, que sufría un tromboembolismo pulmonar, falleció cuatro días después por la muerte cerebral que le provocó la asfixia ese 14 de enero. Ahora, los padres del joven acusan al SUMMA 112 de no activar el protocolo adecuado, al no haber enviado una UVI móvil desde la primera llamada, y de "falta de humanidad".