La evolución es favorable. El hombre que fue trasplantado de corazón en la madrugada del viernes en el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín se recupera de manera positiva. Después de superar unas horas críticas tras la intervención, tuvo que volver a pasar por quirófano para que los cardiólogos le drenaran y frenaran un sagrado, ya que sufría problemas de coagulación. Esa segunda operación, según fuentes hospitalarias, se trata de un "procedimiento frecuente", ya que es habitual que los pacientes que someten a este tipo de cirugías sangren más que otros.
Tras la segunda intervención el paciente regresó a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), donde un equipo multidisciplinar se encarga de su cuidado y de controlar cómo responde ante los tratamientos postoperatorio.
En una operación de tanta complejidad y con un receptor del órgano que sufría una cardiopatía avanzada, es imprescindible extremar todas las precauciones. Por esto las primeras 48 horas después de la cirugía son cruciales para la mejoría del paciente. La intervención para reemplazar el órgano vital -la segunda que se lleva a cabo en un hospital de Canarias- duró cuatro horas y se produjo de madruga.
El primer trasplante de corazón que se hizo en las Islas se produjo el pasado 4 de diciembre y el paciente, un hombre de 63 años, ya tiene el alta hospitalaria. Esta operación se convirtió en un momento clave para la medicina en las Islas, ya que se abrió una puerta para que los pacientes con problemas cardíacos avanzados puedan encontrar una solución médica a su patología en el Archipiélago. Según datos de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, cada año tenían que desplazarse entre 12 y 15 enfermos cardíacos a la Península para someterse a un trasplante o para acudir a una revisión médica.
Ahora, el hospital Negrín puede dar respuesta a estos pacientes y se ha convertido en centro de referencia en trasplantes de corazón en Canarias. La Unidad de Trasplante Cardiaco se formó en el Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña, que cuenta con equipos de prestigio y es pionero en los programas de este tipo de intervenciones.
El equipo del Negrín está formado por dos cardiólogos y un jefe de servicio. El resto de especialistas en problemas del corazón actúan como consultores y sirven de apoyo en la atención de los pacientes. La Organización Nacional de Trasplantes (ONT), que es la que autoriza a los centros hospitalarios para realizar estas operaciones, también se encarga de velar por el anonimato del donante y de la persona que recibe el órgano.
