Guayedra, en la costa de Agaete, ofrece estos días un singular espectáculo, un campo de girasoles florecidos que despierta la curiosidad y levanta la pasión por capturarlos para inmortalizarlos en imágenes de fotos y vídeos. Tal es el poder de atracción de los girasoles que no hay quien pase de largo por la carretera entre El Risco y Agaete. En la foto que acompaña a este texto se puede observar a un nutrido grupo de curiosos armados con las cámaras de sus teléfonos disparando a los girasoles. No se contentan con hacer una panorámica de lejos, desde la carretera, sino que bajan hasta la finca y se meten entre las flores, pisando la tierra, para apreciar todos sus detalles, palparlas y hasta aplastarlas. La concentración de gente en el lugar llega a su punto álgido durante el fin de semana. Los coches quedan aparcados en el arcén en el entorno de una curva peligrosa. El desatino de los domingueros ha quedado reflejado en el hilo iniciado por @EvaMariaMMGG, que muestra su perplejidad ante la falta de sentido común de personas que arriesgan su vida y la de otros por sacarse una foto entre los girasoles de Guayedra.