Cuatro horas y postrado en una camilla. Ese fue el tiempo de espera -en esas circunstancias- de un paciente desde que entró, la tarde de este lunes en el servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, hasta que fue visto por un médico. Ese problema, en ese caso agravado por una dolencia cardiaca, no fue puntual. El colapso en el centro desbordó el servicio y, según denunció ayer el Partido Popular en Canarias, se repitió en los otros cuatro grandes recintos sanitarios de las Islas: Materno-Insular, Candelaria y HUC.
Miguel Ángel Ponce, portavoz de Sanidad del PP en el Parlamento de Canarias, criticó ayer la dejadez de los responsables de la sanidad pública, circunstancia que según subrayó ha propiciado el nuevo colapso en las urgencias de los hospitales públicos.
El diputado regional advirtió que "desde hace semanas la saturación de estos servicios ha propiciado que los pacientes ingresados estén repartidos por los pasillos" ante la falta de espacio para una mejor atención en su ingreso hospitalario a pesar que aún no ha llegado el pico epidémico de la gripe en Canarias.
Teresa Cruz, señalada
Ponce lamentó que "a pesar de los avisos del PP, tanto en el Parlamento de Canarias como en los medios de comunicación, la consejera socialista de Sanidad no ha sido capaz de adoptar medidas de choque ni planes de contingencia para prevenir la repetición de estos colapsos en unos servicios públicos fundamentales para la ciudadanía".
El caso del paciente que abre estas líneas, denunciado ayer por sus familiares no es el único. "La situación llega a ser tercermundistas", apuntaba el hermano de otro afectado que se trasladó el lunes desde Guía.
Para el diputado del PP "es lamentable que la falta de previsión del equipo de la consejería lo paguen los pacientes". "Lo único cierto a día de hoy", añadió, "es que con este panorama tenemos a unos 200 pacientes en los servicios de urgencias en camillas y se siguen viendo pasillos pendientes de ingreso en camas de planta o centros concertados entre los cuatro hospitales de referencia de ambas provincias".
El PP lamenta que "pacientes sin intimidad, con familiares sentado a su lado en una silla, con tubuladuras de oxigeno y sueros colgando de la camilla que han sido incluso imagen nacional en los informativos televisivos".
Además, Ponce racalcó que desde la semana pasada ya varios sindicatos han confirmado que la situación es "caótica" y auguran que cuando llegue a su pico máximo -aun fase pre-epidémica, según el sistema de vigilancia nacional de la gripe en España- "el bloqueo puede ser monumental".
Para el portavoz de Sanidad del PP en el Parlamento de Canarias "vuelve a llover sobre mojado" y no solo por los colapsos de las urgencias sino "por las eternas listas de espera quirúrgicas que subieron el pasado mes de diciembre en más de un millar de personas si se contabilizan desde el mes de junio de 2019 y que además siguen sin publicarse oficialmente a pesar de promesas de decretos y de hacerlo mensualmente".
133 días de espera
La demora media en diciembre se sitúa en 133 días, seis más que en junio del pasado año, cuando el nuevo equipo de la consejería de Sanidad, con Teresa Cruz al frente, desembarcaba en la gestión de la Sanidad pública en las Islas, según indican desde el PP.
"Finaliza enero y no tenemos ni todos los datos de lista de espera del segundo semestre de 2019 ni el del mes de enero de 2020", lamentan. Esa situación ha dado origen, según denuncia Ponce, a que se hayan paralizado las cirugías programadas por no disponer de camas.
