El Ministerio de Salud de China elevó ayer a 722 los muertos por el brote del nuevo coronavirus y a 34.546 los afectados en el país. En concreto, el viernes se registraron un total de 86 muertes por el coronavirus, 81 de ellas en la provincia de Hubei, donde se encuentra la localidad de Wuhan, epicentro del brote, dos en la provincia de Heilongjiang, una en la de Henan, otra en Gansu y una más en Pekín.

El Gobierno chino ha dado orden de acelerar el procedimiento de aprobación de los tests que detectan la neumonía causada por el nuevo coronavirus. La administración ha aprobado el registro de productos de siete empresas, para reforzar la capacidad de suministro de de estas pruebas.

Ayer se confirmó que un ciudadano estadounidense ha fallecido tras sucumbir al coronavirus y otro ciudadano japonés ha muerto probablemente por la misma causa en Wuhan, según han informado las respectivas autoridades de sus países.

El ministro de Salud japonés, Katsunobu Kato, confirmó ayer que se han producido tres casos más del nuevo coronavirus en el crucero Diamond Princess, por lo que son ya 64 los afectados, en el barco que viajan 3.711 personas de hasta 56 nacionalidades distintas y que actualmente se encuentra en cuarentena en el puerto de Yokohama. Los tres pasajeros, dos norteamericanos y un chino, han abandonado el crucero y han sido hospitalizados. Con estos tres casos, el número de afectados en Japón ha alcanzado los 89, según la agencia de noticias nipona Kyodo News. El origen de la propagación de la infección a bordo proviene de un hombre de 80 años que desembarcó en Hong Kong, el pasado 25 de enero. El Gobierno nipón pidió a los pasajeros del crucero y a la tripulación que permanecieran en el barco dos semanas más a partir del miércoles.