La gallina canaria es única y diferente a cualquier otra. Tanto a la andaluza, la más cercana geográficamente, como a la balear, con la que tiene similitudes, o a la utilizada con fines comerciales. Lo concluye así un detallado estudio genético elaborado por el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA) con la colaboración de las universidades de La Laguna, Las Palmas de Gran Canaria y Córdoba. Supone un paso clave para considerarla como raza autóctona, lo cual será planteado y defendido ante el Comité sobre este ámbito concreto que pertenece al Ministerio de Agricultura.

Los resultados se presentan en la sede tinerfeña de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias. En el acto están presentes la consejera de Agricultura, Alicia Vanoostende, el Catedrático en genética de la Universidad de Córdoba, Juan Vicente Delgado; la investigadora titular del proyecto, María del Rosario Fresno y Antonio Luis Morales, presidente de la asociación del sector primario La Campera.

El estudio genético forma parte del proyecto global La Gallina Canaria: patrimonio ganadero de las islas. Historia, genética y sostenibilidad de la población avícola. Determina que no se han encontrado evidencias de cruzamientos ni relaciones genéticas con otras razas autóctonas españolas ni con las gallinas comerciales. El estudio concluye que cuatro de las cinco variedades autóctonas -Jabada, Jabada Dorada, Negra y Aperdizada- no presentan diferencias entre sí. Sí se aprecian en la Rubilana, aunque todas forman un único tronco o clúster.

Riqueza

Riqueza

La consejera Vanoostende explica que en base a los resultados "tenemos la posibilidad de declarar a la gallina canaria como raza autóctona", para sumarse al gran número de las propias de la comunidad autónoma, desde el ganado caprino al porcino. Riqueza, matizó, "que debemos proteger".

Para el estudio de diversidad genética intraracial de la gallina se han analizado 198 muestras tomadas de forma aleatoria entre propietarios de La Campera, creada en 2013. Atendiendo a patrones morfológicos fueron representativas de todas.

Para el trabajo interracial se han empleado otras 19 poblaciones de gallinas, 14 razas autóctonas españolas y 4 comerciales. Las muestras se han analizado en el Laboratorio de Genética Molecular Aplicada de la empresa de base tecnológica de la Universidad de Córdoba Animal Breeding Consulting SL de Córdoba. Se ha extraído el ADN de muestras mediante el método de Walsh et al. (2001). La investigación fue llevada acabo con el sistema de microsatélites, fragmentos repetititivos de ADN que no codifican.

El profesor Delgado valora: "No se trata de reconocer por reconocer sino de reconocer para gestionar porque esta nueva raza ofrece muchas posibilidades por la calidad de sus huevos y de su carne e incluso por el valor de sus pluma. No tal vez para una gran producción pero sí para tener un valor económico en un momento de vuelta al campo, preocupación por el bienestar animal en la producción industrial o de incidencia del cambio climático".

El ICIA abre otro capítulo en el proceso tras el estudio. Será el próximo 14 de marzo en la sede del Instituto, en Valle Guerra, donde unas jornadas técnicas pondrán en común todo lo desarrollado. La gallina canaria es única y ahora canta en busca de su reconocimiento como raza. Delgado concluye que entre cuatro de las cinco variedades apenas hay diferencias sólo la Rubilana las presenta. "Tanto a nivel intraracial como interracial la especie es única". Valora el camino que resta hasta el reconocimiento en un modelo español ejemplo para Europa: "Primero un dossier de apoyo, la caracterización, el patrón racial, un libro genealógico y sumar a las entidades locales".